Desde el lanzamiento de VALORANT, Raze ha sido una de las agentes más controvertidas del juego. El personaje cuenta con cuatro habilidades destinadas principalmente a hacer daño, algo que choca con los principios fundamentales del título y con la promesa de Riot que las herramientas de los personajes estarían destinadas principalmente a resultar útiles al equipo.
Este aspecto, que parece haber pasado desapercibido para Riot antes del lanzamiento, se puso en entredicho cuando la comunidad comenzó a tener acceso a VALORANT. Hubo algo discusión e incluso muchos de los streamers o profesionales de otros juegos que tuvieron acceso al título debatían sobre si Raze estaba bien o no, pero parece que finalmente las opiniones negativas han conseguido imponerse.
Según uno de los desarrolladores, las quejas de la comunidad han suscitado preguntas existenciales sobre el juego. Entre ellas hay una que sobresale: ¿por qué un personaje así debería de estar en VALORANT? La duda va mucho más allá de un ajuste estadístico que sería relativamente sencillo de realizar.
Riot no quiere tirar todavía la toalla con Raze. De la campeona esperan que pueda incomodar a los equipos sin que cada granada lanzada signifique conseguir una baja. En principio esperan que los ajustes numéricos sean suficientes para equilibrar el poder de la Agente. Todo depende de cómo acepte a la comunidad esta versión algo empobrecida del personaje, pero por las declaraciones y las dudas parece que Raze podría ser candidata para llevarse el primer rework de VALORANT.
Desde Riot se han puesto manos a la obra para cumplir con su palabra de hacer VALORANT un juego sin trampas. Para ello han ofrecido incentivos económicos a la comunidad de Hackers.
