Con sus más y sus menos, Fortnite: Battle Royale lleva ya tres años con nosotros. En 2017 empezaron las andanzas de este juego multijugador masivo a manos de Epic Games, que además consiguió hacerse un hueco entre los títulos más jugados y destacados del momento. Aparte de conseguir un gran impacto cultural que hace que hasta quienes no han cogido un mando en su vida sepan qué es Fortnite y en qué consiste.
No obstante, esa curva de popularidad ha ido radicalmente de más a manos. El juego de Epic Games ha ido perdiendo usuarios muy rápidamente en estas últimas temporadas del Capítulo 2, y es que aunque consiguiera hacer un gran boom con su famoso Agujero Negro, el contenido que añadió más tarde para suplir el final de diez temporadas del Capítulo 1, hizo que muchos jugadores se desinteresasen por el juego.
Y es que Epic Games redujo considerablemente el arsenal en la temporada 1 del Capítulo 2, reinició el mapa por completo borrando todo lo que habían conseguido hasta el momento; con zonas tan especiales como Pandora o Gotham, que representaban mundos alternativos dentro del mismo mapa. Y eliminó la publicación de notas del parche, así como una reducción considerable de actualizaciones semanales. Que, por otro lado, está empezando a recuperar en este Capítulo 2. Además, el sistema de matchmaking basado en la habilidad y estadísticas tampoco convence demasiado a los usuarios.
Es por ello, por lo que muchos jugadores han iniciado en Twitter el hashtag #RipFortnite para publicar sus quejas con respecto al battle royale de Epic Games. No son pocos los que se han sumado a esa iniciativa. Y, como de costumbre, podemos encontrar dos bandos: los que siguen defendiendo a muerte a Fortnite, y los que creen que ya es hora de ir preparando su ataúd para pasar a otra cosa.
Para más inri, ahora Fortnite se enfrenta a dos grandísimos rivales: Warzone y Valorant. Sendos first person shooters están haciendo que gran parte de la comunidad de Fortnite abandone el juego y vaya a parar a sus lares. El título de Riot Games tiene ahora mismo toda la atención en Twitch debido al drop de las betas cerradas. Mientras que Warzone supone una opción mucho más completa para una gran cantidad de usuarios y con un sistema de matchmaking más saludable que les permite entretenerse más.
Para muchos jugadores, Fortnite está muriendo debido a justamente eso, al entretenimiento. Los profesionales han hecho que el juego se convierta en algo demasiado "serio" y no permite que los jugadores se diviertan en partidas o simplemente pasen el rato en Fortnite. De hecho, algunos jugadores profesionales están dejando de lado a Fortnite, como xIsma, para pasarse a Valorant por falta de motivación.
Fortnite todavía tiene streamers como Ninja o Tfue que le dan un soporte importante en cuanto a espectadores. Pero puede que eso termine muy pronto si Epic Games no se reinventa y devuelve a Fortntie a su era dorada. Tendremos que esperar un poco para ver cómo evoluciona el asunto.