El lanzamiento de Resident Evil Village es motivo de celebración, sin ningún tipo de duda. Viendo la cantidad de grandes videojuegos que se están retrasando debido a los problemas de desarrollo que está provocando la pandemia del coronavirus, es un verdadero milagro que podamos tener en nuestras manos un título como este. Cada nueva obra de Resident Evil se convierte casi en un evento para muchos, igual que ocurría en su día con los estrenos del Universo Cinematográfico de Marvel. Y con razón, porque los monstruos de Capcom son ya parte vital del género de terror y los fanáticos no pueden aguantar ver cuáles son las novedades que brinda cada nuevo título. Resident Evil Village, yendo directos al grano, trae un montón, ya os lo adelantamos.
La historia de Resident Evil Village, sin entrar en ningún tipo de spoiler, nos pone en la piel de Ethan Winters y nos traslada a que parece una aldea maldita en la que habitan todo tipo de monstruos y criaturas fantásticas que claramente se han escapado de la Hammer Films o de Universal para romper un poco con todo lo presentado hasta ahora en la saga. Resident Evil 7, en su momento, ya fue todo un experimento para Capcom, puesto que en mayor o menor medida rompía con muchos de los estándares que se habían mostrado hasta la fecha en anteriores entregas para que la saga pudiera ir un poco más ligada a lo que es la “actualidad de terror” y reformularse un poco a sí misma.
Una mirada al pasado
En aquella séptima parte teníamos que hacer frente a la familia Baker y, además de ellos, a una especie de monstruos que deambulaban por determinadas partes de la casa y que servían como sustitutos evidentes de los zombis de las precuelas. Lo más curioso, es que en la primera aventura de Ethan Winters ya se experimentó bastante en cuanto a tipo de enemigos, gameplay, cámara y demás, y da la sensación, ahora que ya hemos podido completar Village, que todo eso no era más que la punta del Iceberg de todo lo que la compañía tenía entre manos para el tormento de Winters. Porque Resident Evil Village, como explicaremos a continuación, es una montaña rusa que no va a dejar indiferente a ningún jugador. Es una experiencia de horror muy concreta que intenta quedarse con las bases de jugabilidad actuales, combinándolas con unos terrores mucho más clásicos que, podríamos decir, fueron de los primeros en vez la luz en el mundo del celuloide.
Los vampiros, los hombres lobo, los monstruos con aspecto asqueroso, todo eso es solo el principio. Se acabaron los típicos zombis, los monstruos a lo Némesis que salen de pruebas y laboratorios y todo el embrollo de la gran ciudad o de la civilización tal y como la conocemos nosotros. Ahora toca hacer una especie de viaje en el tiempo y reencontrarse con los miedos más primitivos que podemos tener grabados en el cerebro si es que somos habituales del cine de terror. Capcom ha echado la mirada al pasado, en más de un sentido, y ha hecho que Village se convierta, por lo menos para nosotros, en un verdadero imprescindible para la saga.
¿Cómo se siente Village?
La sensación de gameplay que transmite Resident Evil Village, la verdad, es que es de lo más satisfactoria. Es evidente que esta entrega sigue los pasos de su predecesor en este sentido y que muchos apenas notarán la diferencia, pero os podemos asegurar que incluso en esto hay pequeñas cosas que hacen que la jugabilidad sea mucho mejor; más fluida, más dinámica y hasta más adictiva. Resident Evil Village se ha inspirado claramente en Resident Evil 4, ningún secreto teniendo en cuenta que hasta la misma Capcom lo ha repetido en múltiples ocasiones, pero no solamente es la atmósfera o el mercader lo que ambos comparten: también lo es su necesidad de tener que estarse disparando cada dos por tres con algo.
Resident Evil 4, en su respectivo momento de lanzamiento, se convirtió en una de las piedras angulares de la saga, porque además de cambiar el estilo de cámara también aplicó mucha más acción, más armas e impulsó a la saga a salir un poco de sus casillas de survival horror para que pudiera explorar del mismo modo los caminos del shooter. Manteniendo siempre, por supuesto, el equilibrio entre ambos conceptos, porque de lo contrario la fórmula de Resident Evil no puede sostenerse. Resident Evil 6 es el ejemplo perfecto para ello: un placer culpable de muchos que lo arriesgó todo por la acción desenfrenada y se dejó el terror, el suspense y la supervivencia en la taquilla para poner en su lugar un arsenal variadísimo de armas y hasta persecuciones locas con vehículos.
Village hace algo interesante para crecer como videojuego. Y es que recoge el testigo de Resident Evil 7, en el que podíamos encontrar un estilo más cercano a las tres primeras entregas de la saga, y lo fusiona con lo mencionado de Resident Evil 4, pero sin pasarse de la ralla ni dejarse nada en el tintero. El resultado es que se obtiene un producto a caballo entre el survival y el first person shooter que sabe perfectamente qué ofrecer a los jugadores en cada momento. De nuevo, en este análisis no vamos a entrar en spoilers ni nada por el estilo, pero sí podemos deciros que, como en cualquier Resident Evil (y hasta como habréis podido ver en las demos disponibles) Village cuenta con varias fases. Hasta aquí, todo bien. Pero lo que Capcom ha logrado es que cada fase se sienta como algo único que transmite unas sensaciones determinadas, y no simplemente como un túnel en el que hay que ir aumentando marchas para pasar de zona a zona.
Es decir, que Village no es solo un Castillo y una aldea maldita, porque crea un nuevo universo para Ethan Winters y se expande mucho más allá de la séptima entrega. Era muy difícil imaginar, realmente, que se le podría dar una vuelta de tortilla así a una saga como esta, con unos personajes protagonistas tan delimitados, fuertes y conocidos e increíblemente instaurados hasta en la cultura popular.
¿Qué pasa con su apartado técnico?
En lo que respecta a sus apartados gráficos, sonoros y, en general, más técnicos, Resident Evil Village cumple con nota, pero tampoco es que nos haya dejado maravillados. Sí, luce de fábula en PS5 (la versión en la que hemos realizado el análisis) y realmente tiene escenarios que dan un mal rollo tremendo gracias a la construcción de la iluminación que se ha hecho: precisa y sin errores. Acompañada, claro, por un sonido que hasta refleja cómo cruje la madera más alejada de la casa o lugar en el que nos encontremos, manteniéndonos en constante tensión y atentos a cualquier pequeño movimiento.
Eso sí, donde hay que quitarse el sombrero sí o sí es con el diseño artístico que luce el videojuego. Pocas veces nos hemos encontrado con un Resident Evil que cuide tantísimo sus decorados, tanto en interiores como en exteriores. Village es una muestra de cómo el terror puede funcionar también a plena luz del día y en espacios abiertos, sin necesidad de que todo sea oscuro y con pasillos estrechos (que, creednos, los hay a raudales y son de lo más agobiantes).
Puzles, enemigos y acción
En lo que respecta a los puzles, Resident Evil Village nos ha dejado un poco con un sabor agridulce, puesto que tampoco es que haya demasiados y los que hay no representan ningún tipo de desafío. Eso, lógicamente, favorece el ritmo del gameplay, como os comentábamos, pero también hace que no haya apenas nada que obstruya el camino del jugador y haga que este deba perderse un poco por el escenario en busca de pistas. Más que nada porque está todo bastante mascado y las rutas a seguir, aunque ofrecen muchas opciones de exploración, son algo evidentes y se hace extremadamente sencillo saber cómo dar con los objetos clave o las combinaciones pertinentes. No es algo negativo a decir verdad, pero sí que hace que la experiencia, como Resident Evil como tal, quede un poco difuminada en ese sentido.
Ah, los villanos. Uno de los puntos más importantes de cualquier producto de terror. Qué sería de La Matanza de Texas sin Leatherface. O de Pesadilla en Elm Street sin Freddy Krueger. Las películas de terror, por lo menos las míticas y las que representan el género en su mayoría, giran alrededor de los villanos y son estos los que llevan la voz cantante de la historia, a pesar de que siempre nos apeguemos a cada nuevo grupo de supervivientes que se nos plantea como protagonistas. Lady Dimitrescu es solo uno de los muchos enemigos con los que nos vamos a topar y, desde luego, lo hay que os dejarán sin palabras cuando podáis echarles un vistazo en profundidad.
Más allá de los villanos destacados, Resident Evil Village ha aprendido de los errores del pasado de Resident Evil 7 y ha introducido una buena gama de enemigos a los que enfrentarse. Hay una variedad bien calibrada y bien diferenciada para que cada una de las zonas por las que pasamos se sienta única. Además de variar el escenario y los decorados, también habrá diversos tipos de monstruos a los que cargarse, y cada unas debilidades concretas y demás. Vaya, nada que no hayamos visto antes en la saga, pero nunca en una protagonizada por Winters.
Ahora bien, todo eso se compensa con unas secuencias de acción que nos han tenido enganchados al mando como unos enanos. Las capacidades del mando de PS5 salen a relucir aquí haciendo que cada arma, como ocurre por ejemplo en Call of Duty: Black Ops Cold War, tenga unas características específicas y los gatillos se sientan diferente. Parece una tontería, pero en un survival horror no es para nada una sensación agradable ver que no puedes apretar más deprisa el botón de disparo de una escopeta cuando tienes un monstruo delante porque se está intentando simular la dureza del mismo. Son detalles que pueden parecer insignificantes, pero a la hora de ponerse a jugar y manejar momentos de tensión, todo eso hace que el juego se viva muchísimo más.
Y las malas noticias, para el final...
Sí, no todo puede ser perfecto, porque el multijugador de Resident Evil 8, RE: Verse, no estará en el momento de lanzamiento del juego debido a que no ha cumplido con las expectativas impuestas por Capcom. Las betas no fueron precisamente bien y la compañía tomó la decisión de posponer su lanzamiento. De modo que, por el momento, no podremos disfrutar de ese modo multijugador.
La ficha completa
- Título: Resident Evil Village
- Plataformas: PS5, PS4, Xbox One, Xbox Series X/S y PC
- Desarrolla: Capcom
- Lanzamiento: 7 de mayo de 2021
- Precio: 69,95 €