Hemos tenido que esperar algo menos de un mes desde que las consolas de nueva generación han llegado para que el balón eche a rodar con el primer videojuego de fútbol de PS5 y Xbox Series X. FIFA 21 da el salto con una entrega específica que destaca en el marco técnico respecto a lo que ofrece ya en PS4, Xbox One y PC.
Un salto que bien se puede considerar algo tímido y no tan efectista como podíamos esperar. Como cuando es el minuto 85 y quieres conservar el resultado, tocando el balón atrás, gastando unos segundos en sacar de banda o yendo al córner a perder tiempo. Eso es FIFA 21 en PS5 y Xbox Series.
Desde EA Sports se guardan la carta de que la actualización a los nuevos sistemas es gratis si ya tenías el juego; al contrario de lo que ocurre en otros juegos deportivos como NBA 2K21, donde hay que pagar un extra para la versión de nueva generación. Aunque ahí sí se nota el salto.
Ya os contamos en su día un anticipo de lo que nos íbamos a encontrar, así que estábamos avisados. Las mejoras de FIFA 21 llegan en el plano técnico y, si bien cumplen, tampoco hacen que nos echemos las manos a la cabeza. Se notan, sí. Pero para FIFA 22 tocará exigir más.
FIFA 21 next-gen se desmarca en los pequeños detalles y eso lo notaremos especialmente en las escenas cinemáticas de introducción al partido, donde los primeros planos de los futbolistas se ven beneficiados con una mejora bastante sustanciosa. Los rostros están ahora mucho mejor representados, gracias a las nuevas técnicas de modelado y a una iluminación mucho más natural, que se aprecia también mientras se está jugando el partido. Y esto hace que el juego de EA Sports se salve por los pelos de un escarnio. Literalmente.
Lo vemos en jugadores de renombre como Messi o Sergio Ramos. El aspecto en el que más se nota este realismo es en los pelos. El cabello se mueve de una forma tan natural que asusta. Merece la pena poner de titular a Marcelo solo para ver cómo se mueve su pelo al correr. Lo mismo en la barba de los mencionados jugadores.
Esto es genial cuando jugamos con los mejores equipos del mundo, pero no es tan óptima, como es lógico, cuando tomamos el control de equipos más modestos. Los modelados de los jugadores de, por ejemplo, el Real Valladolid, son idénticos a los de la generación 'actual'. Algo totalmente comprensible pero que, al igual que otros aspectos, debe estar más pulido para la próxima edición.
Desde EA Sports también nos dijeron en una sesión preview que habría más nivel de detalle cuando un jugador chuta y se le contraen los músculos o en la flexibilidad del balón. Se aprecia en las repeticiones pero no es algo que afecte y ni siquiera es importante para la experiencia, porque desde la cámara de juego no se aprecia.
También hay alguna que otra nueva secuencia cinemática que veremos en los últimos minutos de partido, cuando hay un gol importante. Los jugadores se vuelven locos y forman una piña en la que incluso aparece hasta el entrenador. Está bien la primera vez que la ves, pero luego se echa en falta más variedad.
El añadido más importante quizás de esta versión sea la inclusión de la EA Sports Cam, una nueva cámara que nos permite ver el partido de forma similar a las retransmisiones televisivas, con una cámara ubicada en el centro del campo que de forma estática se mueve de un lado a otro del campo. Un añadido ideal para los jugadores de esports y competitivos, ya que tenemos ubicados en todo momento a los futbolistas gracias a la perspectiva prácticamente completa del terreno de juego.
Otra novedad curiosa llega en exclusiva para los usuarios de PS5 con las funciones hápticas del DualSense. El nuevo mando de la consola de Sony hace que sintamos cada toque de balón o pugna por el esférico de una forma bastante curiosa.
Pero lo más destacable es cuando los jugadores comienzan a estar cansados. Los gatillos adaptativos se endurecen y tenemos que pulsar con más fuerza el botón de correr, aportando una sensación de esfuerzo bastante curiosa. Aunque también es un festival de ruidos para el mando, cuyo motor se bloquea y desbloquea en apenas segundos si empezamos a combinar la pelota entre jugadores cansados y los que acaban de salir al césped tras las sustituciones, que están frescos como una rosa y tienen liberado el R2.
Por lo demás, el juego incluye las mismas funciones, con la mención de que con el Doble Derecho podremos seguir el progreso que llevemos tanto en FUT como en Volta. No así en el Modo Carrera. Una pega importante es que no hay juego cruzado entre plataformas. Lo lógico sería que los usuarios de PS5 pudieran seguir jugando contra los de PS4 y los de Xbox Series con los de Xbox One. EA Sports debería actualizar pronto ese aspecto.
Si queréis más información sobre lo que ofrece FIFA 21, os dejamos el análisis de la versión original, ya que incluye las mismas sensaciones que se complementan a lo que hemos comentado aquí sobre el primer juego de fútbol de nueva generación en PS5 y Xbox Series X|S.
La ficha completa
Título: FIFA 21
Desarrolla: EA Sports
Plataformas: PS5 y Xbox Series X
Fecha de lanzamiento: 4 de diciembre de 2020
Precio: 69.99€