A principios de este mismo mes de diciembre, el midlaner coreano Lee "GBM" Chang-seok acudió a sus redes sociales para hacer públicos los impagos del Galatasaray, club de la TCL turca de League of Legends en el que militó hasta noviembre de este mismo año. Una situación insostenible dentro de una liga profesional operada por Riot Games que se ha saldado con la prohibición de competir, como mínimo, hasta verano de 2020.
Este es el resultado de la investigación abierta por Riot el pasado 11 de diciembre. A través de un artículo publicado en la web turca de lolesports, los dirigentes de la competición reconocieron los problemas del club a la hora de pagar sus deudas con los que han sido sus jugadores. Tras seguir encallada la situación, se ha tomado la decisión de eliminar al equipo de la TCL y disputar la inminente temporada de invierno con nueve equipos en vez de diez.
Además de prohibir el concurso del Galatasaray en la competición turca de League of Legends, Riot ha roto de manera unilateral los contratos que aún unían a jugadores y staff a la entidad, dándoles la posibilidad de buscar una nueva casa de cara a la temporada que está por llegar.
Por último, en el comunicado se afirma que la licencia del Galata volverá a estar sobre la mesa para ser discutida de cara a la temporada de verano, pudiendo volver a competir si se satisfacen los requisitos que Riot considere óptimos para garantizar el correcto funcionamiento de la entidad.