El giro que dio la carrera de Coko Rodríguez fue, como mínimo, extraño. Del mundo del cine para adultos pasó a los deportes electrónicos, concretamente, a los Fighting Games. Una caída desde 32 metros de altura le retiró de su antigua profesión y le abrió la puerta a una de las comunidades más solidarias de los esports.
Lo que probablemente no esperaba Coko es que tras el giro que dio su vida iba a aparecer un impedimento. Una vez inscrito en SAGA, uno de los torneos más importantes de la escena de Dragon Ball FighterZ que tendrá una parada en Madrid, un revés económico estuvo a punto de costarle su participación. Un desafortunado problema de salud de su perra lo llevó a una consulta veterinaria de urgencia, un coste monetario que le impedía desplazarse al evento.
Sin embargo, hemos dicho que estuvo a punto. La comunidad de los Fighting Games es diferente y al poco de que el ahora jugador anunciara que no estaría disponible para competir ya estaba planeado un streaming para recaudar los fondos necesarios para costear el viaje. Justa recompensa para uno de los miembros más carismáticos de la familia de los FG.
Cuatrocientos euros era la meta y cinco minutos lo que se tardó en conseguirla. La comunidad se ha volcado y Coko estará en la SAGA de Madrid luchando por una plaza en las finales del circuito mundial. Además, solo dos horas después del comienzo del streaming y con 1300 euros recaudados mientras publicamos la noticia, el otrora actor porno acudirá, gracias a los fondos conseguidos, al EVO. Billete asegurado a la competición de Fighting Games más importante del mundo. Además, su perra Rukia está ahora recuperándose y todo indica que, afortunadamente, podrá acompañarlo durante mucho más tiempo
¡Sí señor!
Fotografía de cabecera propiedad de BCN Fighters