Halloween ha pasado de ser una festividad anglosajona para convertirse en un evento prácticamente mundial. Las marcas tampoco desperdician una fecha tan señalada y con tanto tirón comercial y llevan a cabo campañas de marketing entre lo agresivo y lo excéntrico.
La más curiosa hasta el momento la ha llevado a cabo Burger King en uno de sus restaurantes de Tokyo, concretamente en el que se emplaza en el barrio de Shibuya. En ella han rodeado el local de zombis para darle la ambientación más acorde posible para esta época del año. Bajo el eslogan de “no hay Whopper después de la muerte” han incluso cambiado el nombre de la franquicia temporalmente a “Shibuya Ghost Store.”
Una curiosa forma de anunciar un nuevo producto, que no parece ser más que la Whopper tradicional, pero con el pan blanco. Sin duda es una estrategia de marketing tan agresiva como efectiva.