Foto: LoL Esports
Si nos llegan a decir en el mes de febrero que Fnatic estaría a un mejor de cinco de jugar a Worlds, y como mínimo viajar a Corea del Sur para disputarse una serie contra Golden Guardians, cualquier fan promedio de la organización te diría que les estarías bromeando. Sin embargo, el soplo de aire fresco en forma de fichajes y un estilo de juego más coral y agresivo ha propiciado que el equipo de League of Legends de Fnatic haya dado ese paso adelante que todo el mundo esperaba de ellos.
Eso sí, el camino no ha sido nada fácil y han tenido que lidiar contra los elementos y un buen Excel. Fnatic se lo jugaba a una sola carta, ya que fue el quinto equipo en puntos para estas Grand Finals, y solo tenía una bala que tenía que aprovechar, de lo contrario se quedarían fuera y toda esa remada se hubiese quedado en nada. Además, hay que recordar que Excel ya les derrotó 3-1 un mes atrás, lo que podía preocupar a los más escépticos del Milagro de Berlín
Los rookies han derribado la puerta
Gran parte del éxito de Fnatic ha estado en los miembros rookies. Nightshare generó muchas dudas cuando dio el salto a Head Coach del equipo y al final con trabajo y constancia ha demostrado su valía. Noah entró con buen pie tras su buen EMEA Masters y se refrendó en el servidor y Oscarinin fue de los más criticados, aunque muchos de ellos no conocían su gran potencial como top laner.
El propio español fue protagonista a lo largo de la serie, especialmente en el primer mapa, donde con Gwen fue un auténtico quebradero de cabeza para Odoamne y cerró la serie con una bonita Pentakill con la campeona de los bordados y de las costuras. Con esta mezcla perfecta de juventud y experiencia, Fnatic peleará por ir a Montpellier contra BDS, además del tan deseado tercer spot para no tener que jugar un Play-In que puede ser un auténtica arma de fuego. Si no has podido ver esta espectacular serie entre Fnatic y Excel, os dejamos al final de la noticia un resumen de esta eliminatoria.