¿Se imaginan jugar una línea tan desfavorable en League of Legends, que no pudieses hacer daño durante los primeros 22 minutos de partida? Aunque parezca sorprendente, esto sucedió en el partido de los cuartos de final en el que se midieron T1 contra Royal Never Give Up.
Este se produjo en el primer mapa, cuando Royal, sabiendo que Heimerdinger ya estaba fijado como support para Keria, fijó a Nautilus. Este duelo es desastroso para el tanque ya que no va a tener opciones por rango de poder hacerles daño. Si a eso le sumas los slows y CC que tenían tanto Ashe como Heimer, iba a ser imposible jugar la partida
Todavía no entendemos por qué el RNG pensó que sería una buena idea elegir a Nautilus en una botlane de Ashe-Heimer. Heimer se ha escogido de forma específica como un counter de Nautilus en LCK, por lo que hubo un fallo bastante gordo en ese draft y que a la postre derivó en un stomp de T1 en esta primera toma de contacto.
En la pelea del Heraldo no llega a hacer daño
A pesar de la línea tan desfavorable, Ming se movió en numerosas ocasiones por el mapa para ayudar a sus compañeros. Una de esas veces fue en el Heraldo, donde T1 se llevó el objetivo y Royal cuatro kills bastante valiosas para recuperar el tempo de partida, aunque al final no sirvieron de mucho.
Nautilus lanzó su definitiva a Keria, que fue el último miembro que quedaba con vida. No llegó a tiempo a toda la jugada y Ming decidió gastar su destello para aplicarle todo el CC de su definitiva. Esta se canalizó, pero no llegó a ejecutarse ya que sus compañeros lo deletearon antes de eso, por lo que tampoco se llevó una asistencia.
No fue hasta pasado el minuto 21 cuando por fin hizo daño. Fue en una pelea entre el carril central y la zona superior de la jungla de Royal. Ahí, Ming aplicó 509 de daño tanto con su definitiva como con el autoataque que le dio a Oner. Eso si, falló un gancho a melee que parecía bastante sencillo, y más con la hitbox del tanque.
Este fue el último daño que hizo hasta el minuto 30 y hasta que tiraron el nexo, sumó 1.400 más de daño a enemigos, para acabar con un total de 1,9 k de daño, una cifra bastante discreta.
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