Los videojuegos siempre han sido perseguidos por la sociedad, en gran parte debido al gran desconocimiento. Evidentemente, abusar de su uso tiene sus riesgos, pero lo que desconoce la mayoría de la gente son los numerosos beneficios que tiene el ocio digital.
Especialmente, los padres que no han crecido con los videojuegos tienen muchas dudas con respecto a la utilización de los mismos con sus hijos. La preocupación en algunos casos es enorme y hay tanto miedo alrededor de este medio de entretenimiento tan estigmatizado, que no nos paramos a observar los beneficios.
Un hilo que se ha hecho viral
Si lo hacemos nosotros, quizás no seríamos objetivos, así que nos remitimos a un sensacional hilo que ha publicado en Twitter la psicóloga clínica Naomi Fisher, que además se está haciendo bastante viral debido a lo interesante que resulta. Y a que dice verdades como puños.
Algo que destaca Fisher es que le llama la atención el hecho de que un adulto le pregunte a un niño por los videojuegos. Al hacer esto, al interesarse por lo que les gusta, "cobran vida" y les llama poderosamente la atención que un adulto esté interesado en algo que se critica de forma vehemente constantemente. Para muchos niños que no se sienten competentes en ninguna otra parte de su vida, solo se sienten bien delante de la pantalla y terminan siendo su refugio.
"Veo a jóvenes que están realmente aislados, comenzando a hacer conexiones a través de los juegos onlíne. Pueden comenzar escribiendo en el juego y luego pasar al chat de voz. El juego compartido quita presión y pueden relacionarse. Conozco a jóvenes que pueden regular sus emociones con su tablet, tomándose un tiempo en su día para ponerse los auriculares y sumergirse en su zona segura, lo que significa que pueden continuar después", indica Fisher.
Mostrar interés es clave
La psicóloga clínica también indica que prohibir es una de las peores decisiones que los padres suelen tomar cuando llega el momento en el que ven que sus hijos se pasan mucho tiempo delante de la pantalla, cuando lo único que hacen es utilizar los juegos para evitar sus pensamientos y sentimientos negativos. "La cuestión es que el juego es la solución que han encontrado, no la causa. Es la vida difícil lo que tenemos que cambiar", sentencia.
Recomienda todo lo contrario a prohibir, que es unirse a los jóvenes y que reciban así el mensaje de que estamos interesados en las cosas que disfruten, incluso aunque no nos interesen. Así, seguramente su comportamiento cambie de forma positiva.
El hilo termina con una buena reflexión: "Podemos aprender a jugar Roblox, Brawl Stars o Minecraft y apreciar la conexión que eso nos da con nuestros jóvenes. Podemos preguntar sobre su progreso y sobre su nuevo juego. Demostramos que estamos interesados en ellos. Y de esa semilla crecerán otras cosas".
