Emocionantísimo evento el que hemos vivido en Zaragoza con las finales de la Cup de la eLaLiga Santander. Por fin el panorama de FIFA 22 vuelve al formato presencial y el auditorio de la capital maña ha estado lleno hasta la bandera, con representación de los ocho clubs finalistas en el evento. Zidane, un mítico de la escena del simulador futbolístico, se ha llevado la eLaliga Santander Cup tras vencer en la final a Matías Bonano, representante del conjunto local. Además del trofeo, 20.000 euros por ser el ganador del evento.
La tarde empezó con un sorpresón increíble, con la eliminación en el primer partido de Andoni, representante del Atlético de Madrid, uno de los favoritos. David Sánchez, del Granada, dio la sorpresa tras remontar un 3-1, con gol en el último minuto que le llevó a la tanda de penaltis, suerte en la que avanzó de ronda.
El siguiente partido era muy esperado, ya que Matías Bonano, ídolo local, comenzaba su participación en el evento. No le pudo la presión del público, ya que venció por 8-1 a Javato, del Espanyol. En el resto de partidos de cuartos, Alavés y Levante también avanzaron.
Matías y Zidane, probablemente los dos supervivientes más experimentados, vencieron tanto a Granada como a Levante repectivamente. Así comenzó una final con un público enforverecido ante la posibilidad de disfrutar de dos jugadores que han mostrado un nivel impresionante.
Zidane tuvo controlada la primera parte de la final, sometiendo a un Matías que, por primera vez en el torneo, se mostraba vulnerable. Así, el futbolista babazorro se adelantó en la gran final. Pero la tensión se palpaba en el ambiente y no se generaban ocasiones claras por ninguna de las dos partes. Hasta que, como en la vida real, una jugada de Pedri dentro del área sentó a la defensa vitoriana y el Zaragoza empató, provocando los gritos de “Zaragoza, alé” en las gradas. El primer partido quedó en tablas, con todo por decidir para la vuelta.
El segundo partido también se disputó entre el miedo y el respeto. En el primer cuarto del partido, Zidane volvió a golpear por primera vez, obligando a Bonano a ir a remolque, con la presión añadida que eso supone. Zidane, que ha demostrado una técnica descomunal, provocó un penalti al filo del descanso que supuso un remate anímico tras anotarlo por medio de Ronaldo Nazario. Mati Bonano tenía que ir ya con todo para empatar la eliminatoria. Pero el jugador canario, representante del Deportivo Alavés, se alzó con el trofeo