League of Legends es, en numerosas ocasiones, un lugar inhóspito y lleno de usuarios muy especiales debido al diverso nivel mecánica que puedes ver en una sola partida. En la misma Grieta del Invocador puedes encontrarte a un Pyke inflado y lleno de habilidad mecánica mientras que en el carril superior hay una Gwen 0/7 e inflando a un Darius que será imparable después de la primera fase del juego.
Sin embargo, cuanto más nos alejamos de las divisiones más bajas, menos jugadores trolleando vemos (Aunque sigue habiendo por desgracia) y sino que se lo digan a este Twisted Fate, que ha conseguido un asesinato digno de ser uno de los mejores jugadores del MOBA de Riot Games.
La situación es fácil de entender: Twisted Fate iba muy bien en cuanto a farmeo y asesinatos al igual que todo su equipo, por lo que podía permitirse varias frivolidades que pudiesen alegrar aún más la autoestima del jugador en el carril central. Es aquí cuando en su enfrentamiento contra Ahri, intentó un baiteo que provocase que Ahri bajase a los infiernos en cuanto a mentalidad para pasar a la siguiente partida... Y así ocurrió.
El Maestro de las Cartas hizo como que se backeaba en medio del carril, algo que obviamente era bait y que estaba claro que iba a atacar; pero la Ahri, que tal vez no tuvo su mejor partida, decidió tirarse a por el con todo, intentando acertar su charm y utilizando su definitiva para esquivar todo lo posible. Sin embargo, Twisted Fate iba con una build de daño físico puro y duro junto a velocidad de ataque, por lo que acabaría rápidamente con la pobre felina.
Este tipo de jugadas demuestran que, además de poder mecánico, League of Legends es un juego donde tu mentalidad es vital y si eres débil en este ámbito puede ocurrirte este tipo de cosas. Es por ello que hay que tener siempre un mentalidad estable antes de un enorme poder mecánico, ya que si bien perderemos alguna partida que otra, la mayoría de las veces saldrás ganando y con ganas de seguir jugando.