Ubisoft no quiere detenerse en su ascenso por implantar el próximo Assassins Creed como servicio, por lo que están planeando un movimiento que puede ayudarles a aumentar más su tiempo en el desarrollo de Infinity. Y es que el próximo juego de la saga de asesinos volverá a suceder en la época vikinga. Según ha podido confirmar el aclamado periodista Jason Schreier en Bloomberg, Ubisoft convertirá una expansión de Assassin's Creed Vallhala en un juego solitario para poder solventar todos los problemas que ha ido teniendo la compañía durante la salida del último título de la saga.
Recordemos que dentro de pocas semanas se lanzará a la venta Assassin's Creed Valhalla: El Amanecer del Ragnarok, el que se suponía que iba a ser el último gran DLC de la entrega de vikingos con muchísimo contenido por descubir y hasta 40 horas de juego, afirman los propios desarrolladores. Pues al parecer faltaba otro DLC más que finalmente se venderá como un juego standalone, una política que se está viendo cada vez más sobre todo con los juegos de Sony como Uncharted: El legado perdido o Spiderman: Miles Morales.
Según las fuentes de Schreier, este juego estará mucho más centrado en el sigilo que llevábamos viendo durante los primeros juegos de la franquicia y con Basim como el gran protagonista de esta entrega. Se trata de un personaje bastante recurrente en Vallhala, por lo que estará fuertemente relacionado con este juego. Al parecer, todos los problemas de eficiencia en Ubisoft a raíz de los escándalos de los últimos meses relacionados con su rendimiento, desgaste en los trabajadores y los grandes retrasos de muchos de sus juegos han propiciado en este juego.
A la espera estamos de conocer más información y de que se confirme, pero todo apunta a que será una manera de alargar lo máximo posible el tiempo de espera para poder tener listo Assassin's Creed Infinity, que según los rumores funcionará más como un servicio que como un juego como tal.