El pasado 7 de febrero, miembros de karmaVALORANT hicieron públicas las condiciones en las que trabajaban durante su periodo con Motif Esports. Las declaraciones expusieron casos de racismo, acoso sexual, falta de confianza por parte de la organización, entre otras cosas.
Joanne, una de las jugadoras afectadas, compartió en un TwitLonger lo que tuvo que soportar durante su campaña en el VCT Changers de EMEA. Señaló al dueño de Motif Esports, Jack, por acoso sexual durante su estancia. "Eran 'bromas' para él pero no para mí, tampoco lo serían para cualquier otra persona", comentó. De acuerdo con sus declaraciones, la misma persona incurrió en el mismo comportamiento con otras chicas. También llamó "boosteada" a una de las jugadoras previo a un partido importante de VCT Changers. El término "boosted" se utiliza para burlarse y/o hacer menos a alguien porque otra persona ayudó a que subiera de rango. Básicamente, sugiriendo que solo está ahí porque alguien más ganó los encuentros y ella no hizo mucho, demeritando su nivel. Algo que, lamentablemente, suele utilizarse como un peyorativo hacia chicas en juegos competitivos.
Joanne comenta que el dueño intentó hacerla sentir culpable por no jugar con él. Hay menciones de mensajes poco profesionales hacia otras personas, por mencionar algunas actitudes presenciadas en su tiempo con Motif Esports.
Barbora “Rebecca” Řezáčová compartió más casos vividos con la organización. Habló sobre la ausencia de privacidad y cómo se negó un espacio para las competidoras de VALORANT. Al parecer, se les negó la posibilidad de tener chats dedicados para hablar de estrategias y desarrollarse como profesionales. No se les permitió entrenar sin interrupciones e incluso pusieron al entrenador en una posición incómoda: Motif Esports propuso la idea de tener un analista o un segundo entrenador. Las chicas no buscaban algo cercano a ello.
Los tratos recibidos no son los que se esperaba en primera instancia. Rebecca hace hincapié en que no son cosas que una organización haría si quiere abrirse espacio en la comunidad de VALORANT. "Sin importar cuánto haya jugado, nunca me sentí apreciada dentro de la organización. Nunca recibí palabras de aliento como recompensa", declaró.
Acerca de las acusaciones de racismo, Rebecca menciona que fueron hacia la jugadora Mercy, de nacionalidad turca. De acuerdo con el TwitLonger, fue víctima de comentarios racistas que estuvieron presentes en chats de Twitch. Aunque recibió una disculpa por parte de los responsables, los comentarios siguieron presentes. Sin mencionar que previo a ello se intentó justificar la naturaleza de los mismos. En cuanto a las jugadoras y entrenador checo, miembros de Motif Esports se burlaron de su pronunciación en inglés por "no ser perfecta".
Motif Esports y Jack desaparecieron de las redes sociales. Las chicas continúan en la competencia Changers bajo el nombre de karmaVALORANT. Sin embargo, casos así no deben olvidarse ya que es algo que debe continuar conversándose en favor de una mejor escena competitiva.