Una noticia nos ha sobresaltado hace apenas unos minutos. Mihael "Mikyx" Mehle deja de estar en el banquillo de G2 Esports y ficha por Excel Esports. El club británico, tras toda una vida fuera de los playoffs en la máxima competición europea de League of Legends, ha decidido realizar un movimiento que ha hecho retumbar los cimientos de la propia LEC.
Ya no es que se trate de un blockbuster, como llaman los estadounidenses a este tipo de traspasos, sino que es un movimiento que trae asociada mucha polémica... Aunque paradójicamente entierre la historia de la "cárcel de G2", término usado popularmente para hablar de esos banquillazos a estrellas a la espera de que alguien pague el dinero solicitado. Como el caso de Mixwell, por ejemplo.
Y la razón es que este movimiento expulsa del cinco titular a Henk "Advienne" Reijenga, una apuesta de finales de la pasada temporada que este año había recibido los galones del equipo junto con el jungla Mark "Markoon" van Woensel. Pero tras dos semanas y cinco partidos, abandona el equipo con un muy señorial twitlonger.
LEC es un juego de suma cero
Si hay un grupo de personas a los que considero prácticamente unos enviados de los dioses, es a quienes crean juegos de mesa y discurren sus reglas. Me parece extremadamente complicado, porque no sólo es que tengas que dar con unos preceptos, una forma de ganar y una de perder, sino que todo esto tiene que ser divertido. Esta última se puede aplicar a los videojuegos, pero ellos cuentan con las interacciones físicas que en un tablero se limitan a jugar cartas, o a mover tu ficha.
Pero otro área igual de interesante es la teoría de juegos, una rama de la matemática que busca definir los modelos detrás de todo tipo de divertimentos. Y una de las divisiones que se pueden hacer, es la de si un juego es de suma cero o de suma distinta a cero. Para explicarnos: el póker es un juego de suma cero, porque el que gana se lleva lo que ha perdido otro; mientras que el fútbol puede ser un juego de suma distinta a cero, porque en los empates se reparten 2 puntos, mientras en las victorias el ganador se lleva 3.
LEC es un juego de suma cero. Los equipos se dividen por victorias y derrotas, por lo que para que uno sea campeón, ha de ganar mapas que el resto ha perdido. Dicho de otra forma, para que otros equipos hayan estado en playoff durante estos últimos años, otros como Excel han tenido que perder... Y mucho.
Dicho de otra forma: esto va de ganar
Desde su entrada en LEC en 2019, Excel se ha quedado fuera de playoffs durante 3 años consecutivos, o lo que es lo mismo, durante 6 temporadas. Esto significa no haber logrado estar nunca entre los seis mejores de una competición de diez equipos. Durante este tiempo hemos tenido al mejor G2 de la historia, Rekkles se ha ido de Fnatic y ahora milita en la liga francesa, y Origen pasó a llamarse Astralis. En todo ese tiempo, Excel ha intentado muchas cosas, como fichar veteranos, fichar jóvenes para desarrollarlos e incluso darle las llaves del club alguien con todo el pedigrí en su momento como es Joey "YoungBuck" Steltenpool.
Y nada ha funcionado. El equipo sigue sin llegar a esa tierra prometida que son los playoffs y tampoco convence a nivel de marca, siendo el equipo con menos followers en Twitter de los diez que integran la competición, al menos si eliminamos de la ecuación al recién llegado BDS, y si consideramos que la cuenta de Astralis para su sección League of Legends abierta hace unos meses no representa enteramente al club y su marca.
Es hora de afrontar algo que ya dije en su momento y que podéis leer en el enlace de arriba. No tenemos ni idea de los procesos internos de un equipo y bien podría haber sucedido algo con Advienne. No lo parece porque su tuitlonger es bastante señorial, a pesar de destacar su desaprobación con respecto a como le han tratado. Tampoco sabemos porqué Excel no hizo este cambio durante el mercado de fichajes, o porque no fichó también a Rekkles, ya puestos, si es que querían talento veterano y de probada eficacia.
Quizás es que ahora el precio de Mikyx es mucho más bajo al haber empezado la temporada, quizás es que ahora sí está dispuesto a jugar en Excel y hace un mes no, o puede que sólo necesitase ver jugar a sus compañeros para que le entrasen ganas de competir otra vez. O también tendría sentido que el equipo, a pesar de empezar con un digno 2-3, haya presionado al staff desde el plano inversor para que consigan resultados ya mismo.
Y como no lo sabemos, sólo podemos reflexionar sobre los hechos. Y el hecho principal aquí es que han cambiado a un buen jugador, con un rendimiento positivo en lo poco que va de temporada, y con una proyección importante, por un talento generacional, uno de los mejores apoyos de la historia de la competición europea y alguien con experiencia a raudales. Otro asunto es el tema ético, en el que a buen seguro han hecho cosas muy mal.
En ese cambio, Excel gana. Gana porque, aunque League of Legends nos ha demostrado desde hace tiempo que las dinámicas de grupo son muy importantes, también salta a la vista desde hace muchas temporadas que Excel pierde muchos partidos por la falta de talento determinante. A pesar de lograr buenos juegos tempranos, o pelear bien en ciertas teamfights, les faltó en muchas ocasiones algo de contundencia para ganar ese mapa adicional que les llevaría a la post-temporada.
Foto de LoL Esports.