Estamos inmersos en un cambio generacional y eso tiene un proceso que lleva su tiempo. Hay que tener en cuenta que, aunque estemos ansiosos por ver cómo PS5 puede explotar sus capacidades, no hay que olvidar que se han vendido más de 114 millones de PS4 en todo el mundo. Y no pueden olvidarse de sus usuarios en tan poco tiempo, incluso aunque PS5 esté vendiendo tan bien.
De ello ha hablado el conocido analista Michael Pachter, que sitúa como 2023 como el año en el que todo cambiará y PlayStation pasará a centrarse totalmente en PS5, dejando de lado PS4. Algo, que muchos pensaban que sería antes, pero la confirmación del lanzamiento de juegos AAA como Horizon Forbidden West o God of War 2. Estas son las declaraciones que recogen en el portal GamingBolt.
"Sony no puede ignorar PS4, al menos hasta que haya vendido suficiente PS5 para hacer rentables los costes de desarrollo de un videojuego. Si tu plan es vender mínimo tres millones de copias de tus lanzamientos para cubrir gastos, no puedes hacerlo si no tienes más de siete u ocho millones de PS", dice Pachter.
Por otro lado, eso sí, Pachter también dice que habrá juegos que sí sean exclusivos para PS5, ya que en cierta forma hay que incentivar a los usuarios a que den el salto, pero es algo que todavía queda lejos. Ratchet and Clank: Una Dimensión aparte o el próximo Deathloop son ejemplos de esta estrategia.
Habrá que esperar, ya que los mencionados Horizon Forbidden West y God of War 2 llegarán en 2022, aunque lo de las aventuras de Aloy no se han confirmado oficialmente.