Las trampas son uno de los grandes problemas de Call of Duty: Warzone. Conforme han ido avanzando las temporadas, el juego ha pasado por diferentes fases en relación con este tipo de jugadores. Sin embargo, el título se encuentra ahora mismo en una de las etapas más problemáticas con respecto los hackers, que están invadiendo las partidas del battle royale ante la falta de un sistema que evite su llegada desde un primer momento.
Un escandaloso tramposo cazado en directo
La proliferación de los cheats ha llevado a que algunos sean cazados en directo. Se trata de una desagradable posibilidad a la que la comunidad incluso ha llegado a acostumbrarse y que nos muestra una visión rápida al estado actual de las partidas de Call of Duty: Warzone. Algo que también afecta a los grandes creadores de contenido y que ha dado lugar a algunos de los momentos más ridículos de la historia del juego, como el capturado por DiazBiffle y sus compañeros.
Eliminar por completo a los tramposos de un videojuego es prácticamente imposible y más teniendo en cuenta características especiales como la condición de free to play de Call of Duty: Warzone. Sin embargo, los jugadores no se explican como estas trampas tan descaradas no son detectadas de inmediato por el propio juego de forma que al menos pueda expulsarse a estos jugadores que eliminan cualquier posibilidad de disfrutar las partidas.
Con los cambios en el mapa, el nuevo ajuste de las armas y el rumbo que ha tomado el battle royale el juego podría estar en el mejor momento de su historia. Sin embargo, los problemas con hackers y tramposos se han convertido en un quebradero de cabeza casi imposible de solucionar para Activision que sigue asolando el juego y nos deja estos desagradables momentos en las partidas.