De media, cada campeón de League of Legends consigue una pentakill cada mil partidas. Un logro extraordinariamente extraño que algunos personajes obtienen de forma algo más sencilla y que todos los jugadores quieren conseguir al menos una vez por temporada. Sin embargo, sigue siendo extraordinariamente poco habitual y lo más probable es que tengas que dedicar una buena cantidad de horas para poder presumir de conseguir esta hazaña en una partida clasificatoria.
La Pentakill más rápida de la historia
Karthus no es uno de los campeones que más fácil lo tiene para conseguir grandes cadenas de bajas. Este temido personaje se sitúa en la mitad de la tabla en cuanto a dificultad ocupando el puesto número 64 con un ratio de pentas del 0,0015. Es un dato algo superior a la media pero que nos obligaría a jugar cerca de 700 partidas hasta lograr una pelea exitosa en este sentido.
Pese a todo, el personaje tiene una característica única que le ha permitido lograr un récord insuperable. Mil veces lo hemos visto en jugadas preparadas en partidas personalizadas, pero muy pocas en una situación real. Hablamos, por supuesto, de la posibilidad de conseguir una Pentakill instantánea. Un logro insuperable en la lógica de League of Legends y que se queda con el mérito de ser lo más rápido posible que podemos conseguir si medimos en el tiempo desde la primera hasta la quinta baja.
El ejemplo que os traemos tuvo lugar en una de las mejores épocas de Karthus en League of Legends. Durante un tiempo el campeón era la mejor elección posible en la jungla, beneficiándose de su capacidad para limpiar campamentos y siendo siempre acompañado de Nunu para llevar a cabo una estrategia de funnel que le permitía hacer grandes cantidades de daño con la utilización del Requiem. Una forma de jugar con la que Riot Games acabó muy pronto, pero que nos dejó este momento histórico de una de las mayores aberraciones del juego.
Quedaría por determinar la otra variable en cuanto a rapidez: la que se consiguió en el minuto más temprano posible de la partida. Un registro para el que también tenemos un candidato.