Aunque el metajuego de League of Legends está en constante variación, lo cierto es que las últimas modas del juego están siendo de lo más agradables. Tanto en competición como en partidas clasificatorias, los campeones más populares son capaces de llevar a cabo jugadas de lo más estéticas que dejen boquiabiertos a espectadores y jugadores. Una tendencia con la que parece que Riot Games está contenta, y sobre la que ya no se esperan grandes cambios de cara al resto de la temporada tras la introducción del último parche.
Uno de los nombres propios que ha aparecido gracias a los últimos cambios ha sido Lee Sin. Las mejoras recibidas en diferentes parches sentaron fenomenal al monje, que ha acabado convirtiéndose en una elección viable hasta en tres posiciones tras pasar por un largo periodo en el que llegó a ser olvidado. Vuelta perfecta para un campeón clásico de League of Legends que ha sido capaz de protagonizar algunas de las grandes jugadas de la temporada.
Una de las más destacadas ha tenido lugar en la LPL China. La competición del gigante asiático enfrentaba hoy un partido de trámite entre JD Gaming y Ultra Prime en el que los primeros llegaban como claros favoritos. Sin embargo, una jugada que tuvo lugar en el primer mapa de la serie fue suficiente para justificar el tiempo invertido en ver las partidas y trajo consigo un movimeinto que presenta clara candidatura a ser el mejor del año en el juego profesional.
Un instante después de que Yagao utilice la patada sobre el Jhin Rival, Kanavi entra con la definitiva para agrupar a los otros tres rivales. De esta forma, la victoria es doble: el tirador inflige daño sobre todos los rivales reposicionados y la ultimate de Diana también alcanza al tirador enemigo. Un movimiento quirúrgico complicado de ejecutar hasta para la élite de League of Legends.