El mercado de las criptomonedas es el Wall Street de los millenials, muchos de aquí tenemos un amigo, primo o conocido que ha invertido aunque haya sido una pequeña cantidad en las famosas Bitcoin. Por otra parte, todos conocemos a alguna persona que no encuentra una buena tarjeta gráfica a un precio justo dada la demanda que tienen entre aquellos que se dedican a la minería.
Este año 2021 ha fluctuado mucho el mercado de las criptomonedas, representando un ascenso por ejemplo en la Bitcoin que subió varios puntos en el primer trimestre. Adquirir una buena GPU a día de hoy es una tarea muy complicada ya que sus precios desorbitados hacen que montar un ordenador por piezas sea prácticamente misión imposible. Esto es un problema que sin embargo los jugadores de consolas no tienen ya que juegan con piezas ensambladas y destinadas para este tipo de unidades.
El mercado de las GPU se está resintiendo y algunas ya están comenzando a encontrarse en diversos países, como es el ejemplo de China que ha visto como tarjetas gráficas como la ASUS RTX 3060 ha descendido su precio desde los 1754 euros y que ha descendido su precio hasta los 610 euros. Los precios de NVIDIA también ha visto reducidas sus cifras desde el mes de mayo, aunque continúa estando muy por encima del valor de mercado que en un inicio debían tener.
La presencia de más tarjetas gráficas puede venir de las medidas que China está tomando en contra de las criptomonedas, un quebradero de cabeza para el gobierno chino que ha obligado a los bancos a bloquear toda operación que guarde cualquier tipo de relación con la Bitcoin. Tesla, al mismo tiempo, ha confirmado que no aceptará más el Bitcoin como un metodo de pago, lo que ha hecho que se devalúe desde casi los 40.000 euros a los 24.852 euros.
Por esto, los mineros parecen ya no encontrar tanto interés en las nuevas tarjetas gráficas, otro problema para ellos ya que no cuentan con todas las prestaciones que anteriormente ofrecían. Esto hace que monedas como Ethereum, puedan minarse sin consumo de GPU y optando por otros métodos al igual que Chia, que aprovecha el almacenamiento libre del sistema.
Se trata de una de las competiciones más extrañas de la historia de los esports, y no es para menos. Un torneo organizado por Team Liquid con unos cuantos Bitcoin como premio que por entonces apenas tenían valor, pero que pueden haberlos hecho millonarios.
