Uno de los grandes objetivos de Riot Games de cara a esta Temporada 11 de League of Legends era acabar con el mal comportamiento en partidas clasificatorias. La desarrolladora comenzó una serie de tareas para tratar de crear un sistema perfectamente capaz de acabar con los jugadores con peor conducta de todo el juego. Sin embargo, parece que las mejoras introducidas no han sido suficientes para dar en el clavo y evitar que sigan apareciendo jugadores capaces de saltarse todas las normas de forma prácticamente impune.
Uno de los casos más llamativos que hemos encontrado es del que probablemente sea el enemigo número uno de los jugadores de partidas clasificatorias. Un usuario cuyo nombre no vamos a revelar, pero que cuenta con unas estadísticas terroríficas: ninguna victoria y 53 derrotas en lo que va de temporada competitiva. Es decir, ha estado aterrorizando a los jugadores de League of Legends sin sufrir consecuencias desde que empezó la temporada hasta hace unos diez días.
El modus operandi de este jugador varía entre partidas, aunque parece que principalmente consiste en quedarse AFK mientras burla a los sistemas de detección. Sin embargo, sorprende que tras más de medio centenar de partidas el sistema no detecte a un jugador que ha provocado que en más de una decena de ocasiones haya que usar la herramienta de rehacer. Más teniendo en cuenta que la mitad de las veces que su equipo no puede utilizar esta función acaba perdiendo irremediablemente.
De toda la muestra disponible, solo en un total de cinco o seis ocasiones ha comprado más que los objetos iniciales o se ha dedicado a conseguir algunos últimos golpes a los súbditos. Unas fechorías que duraron hasta hace por lo menos diez días. Al menos, eso indican los registros del jugador, que no ha vuelto a poner un pie en la Grieta del Invocador desde entonces: bien sea por una sanción que le impida jugar a League of Legends o porque, simplemente, no ha tenido tiempo para hacerlo.
Otro bug aqueja League of Legends, esta vez en el Abismo de los Lamentos. La buena noticia es que ya hay un posible responsable, pero quizá tarde en solucionarse.
