Uno de los principales "peros" de PS5, además de los problemas de stock que hacen que sea casi un milagro el tener una de estas consolas en casa, es el del almacenamiento de la máquina. Sus 825 GB se quedan en nada si restamos los recursos que necesita el OS y que la instalación de algunos juegos supera los 100 GB. Ante eso, nos queda la opción de ampliar el almacenamiento SSD pero, de momento, no hay ninguno a la venta.
Parece que la llegada del almacenamiento externo para PS5 está más cerca según las declaraciones de un portavoz de Sony al medio Bloomberg. Asegura que están trabajando para habilitar unidades M.2 NVMe en la consola de Sony con una actualización del firmware que permitirá la instalación de soportes y además desbloqueará diferentes velocidades de ventilación en la consola para evitar que se caliente.
Según indica, la arquitectura está personalizada para acelerar los tiempos de carga, y hace que se tenga que cambiar la forma de ampliar la memoria, no con un disco externo como se hacía en PS4. Cuando llegue la actualización, los jugadores tendrán que quitar simplemente una pieza de plástico e implantar la nueva unidad, con lo que se eliminará la limitación que tiene actualmente, permitiendo más memoria sin que el rendimiento se resienta.
Este proceso lo enseñaron en un vídeo de hace unos meses en que el ingeniero Yasuhiro Ootori desmontaba PS5 pieza por pieza para desgranar el interior de su hardware. Allí, ya aseguraban que, con los juegos que se lancen en el futuro se analizará el rendimiento de la APU para optimizar el ventilador según los datos obtenidos.
En las últimas horas, hemos conocido parte de los próximos planes de PS5 gracias al último State of Play, en el que hemos podido ver nuevo gameplay de Returnal, la fecha de Kena: Bridge of Spirits o las novedades de FF7 Remake.