Ayer mismo CD Projekt Red nos avisaba de que el parche 1.2 de Cyberpunk 2077, la esperadísima versión que solventaría multitud de errores heredados de ese apresurado desarrollo, no vería la luz hasta dentro de un tiempo. El estudio polaco hacía público que la situación derivada del hackeo sufrido por la compañía había afectado al desarrollo de este parche, y que no saldría durante el lapso de tiempo indicado; que debería ser durante los próximos días o semanas.
Ese hackeo, que acabó con la filtración del código fuente de varios trabajos de la compañía como The Witcher 3 o Gwent, así como el robo de multitud de información sensible de los inversores y trabajadores, está siendo un quebradero de cabeza. Al comunicado de CD Projekt RED ahora hay que sumar una nueva información publicada por Jason Schreier que arroja luz a esta triste situación.
Según comenta el periodista de Bloomberg, los trabajadores remotos de la compañía, que son muchos en una situación de pandemia como la que vivimos, no están pudiendo trabajar desde sus casas. El hackeo habría puesto en riesgo la infraestructura misma de la compañía y estos profesionales llevarían dos semanas de vacaciones forzosas, al no poder acceder a la red interna de CD Projekt RED.
"A pesar de estas vacaciones no planeadas, el hackeo ha sido una pesadilla para los empleados. Los hackers pueden haber accedido a su información personal, incluyendo el número de identificación polaco y sus pasaportes, obligando a que la compañía diga a sus empleados que congelen la actividad y reporten cualquier brecha de seguridad.", cuenta Schreier en la pieza publicada esta misma noche,
Además de esto, CD Projekt RED habría instado a sus trabajadores a enviar sus ordenadores al servicio de seguridad de la compañía, para que estos puedan ser escaneados en busca de malware, tal y como relata en su artículo el periodista. Una situación tremendamente negativa que se suma a la enorme cantidad de problemas que ha tenido Cyberpunk 2077 desde su lanzamiento.