Una de las premisas más aceptadas de League of Legends es que hay roles demasiado poderosos. La misma Riot Games ha reconocido que la jungla tiene demasiada influencia en las partidas y ha aplicado cambios para corregirlo. Sin embargo, esa no es la única posición que genera cierto consenso en la comunidad. Aunque partiendo de la premisa contraria, hay una buena cantidad de jugadores que señala a los supports como los personajes más inútiles en una partida.
Este pensamiento viene arrastrándose desde hace tiempo y en su día era bastante certero, pero hace mucho que dejó de ser cierto. Los apoyos se han convertido en la pieza fundamental de las rotaciones y los máximos responsables de ganar la línea en el carril inferior. Especialmente con el metajuego actual, donde los personajes con capacidad de iniciación y un kit de habilidades que le permita llevar las riendas de la partida se han convertido en los más populares de la posición.
Sin embargo, los jugadores de League of Legends más veteranos tienen sus costumbres y no todos quieren aceptar la idea de que los apoyos puedan llevar la voz cantante. Hacen falta pruebas para convencerlos de que el error no podría ser mayor. De hecho, estos jugadores tienen la capacidad de echarse al equipo a la espalda siempre y cuando sus compañeros tengan la habilidad justa como para acompañar con daño sus jugadas.
En esta jugada vemos un buen ejemplo de lo que puede llegar a ser el potencial desatado con un Alistar que decidió ponerse la camiseta de encestar triples y vestirse de LeBron James para demostrarle al Zed enemigo que los supports tienen mucho que decir en el League of Legends moderno. Primero con una extenuación perfecta que, acompañada del mal hacer mecánico del rival, sirve para salvar la vida de su tirador. Luego con un lanzamiento directo a la trampa situada bajo torre por su compañero para rematar el día.
Lo cierto es que la predicción no era tan complicada, pero la ejecución y el resultado estético está a la altura de las mejores jugadas, y nunca son pocos los motivos para reivindicar la relevancia de los supports.
Fuente