Conseguir una PlayStation 5 es casi imposible, incluso la cuna de Sony, en Japón. Una buena prueba de ello es lo que sucedió esta pasada semana en Yodobashi Cameras, una enorme tienda de electrónica del tecnológico barrio de Akihabara. Una nueva remesa de consolas de nueva generación de Sony hizo que se generase una aglomeración de gente que no es recomendable en ningún caso, pero mucho menos en medio de una pandemia vírica como es la COVID.
El detonante de esta situación habría sido que esta tienda no tenía en dicho momento sistemas de restricción de venta como la trazabilidad de tarjetas o la necesidad de ser socio de la misma; sistemas que sí tienen otras tiendas de electrónica y videojuegos del país.. Esto es importante porque permitía que los especuladores se pusieran a la cola y esperasen turno, el sistema que habilitó esta tienda para poder ganar el derecho a comprar una de las flamantes PlayStation 5.
Las imágenes superiores son completamente sobrecogedoras, así como completamente irreales en un país como Japón, que decretó el Estado de Emergencia hace ya un tiempo y con Tokyo a la cabeza del número de casos. En otras ocasiones se habría realizado una rifa en la cual te ganas el derecho a comprar una PlayStation 5 tras un sorteo; pero no fue el caso en Yodobashi Cameras; y ese habría sido el problema.
Tras la actuación policial de la pasada semana, Famitsu desvela que la tienda ha implementado un nuevo sistema para la venta de estas máquinas. Ahora será necesario hacer uso de la tarjeta de la tienda, que tiene un tiempo de espera estimado de unas dos semanas. Esta tarjeta permite además ver los pagos pasados del usuario y comprobar si adquirió varias Switch en el pasado para revenderlas. De esta forma, se puede disuadir a quien simplemente quiere hacer caja con la PS5.