Aunque en las últimas semanas hayamos mirado lejos de nuestras fronteras, la Superliga de League of Legends sigue en marcha y está presentado una temporada cargada de alternativas. G2 Arctic ha cogido la directa aprovechándose de los malos resultados de Vodafone Giants y del periodo de adaptación de MAD Lions para empezar a poner tierra de por medio en la clasificación y, gracias a su última victoria, continúan invictos tras cinco partidos disputados.
Pese a que parecía fácil, su enfrentamiento más reciente ante BCN Squad se había convertido todo un dolor de cabeza. Tras varias peleas ganadas en el juego temprano el partido se estaba haciendo bola para los muchachos de Melzhet. Sin embargo, Oscarinin se saltó las normas escritas en los libros de estilo de League of Legends para aportar un toque creativo y resolver la partida con un detalle de calidad que bien podría ser la jugada de la jornada.
El top laner de G2 Arctic había encontrado buenos flancos a lo largo de la partida para hacer brillar su selección de Kennen, y seguía intentando llevar a cabo su plan en el clásico Baile de la zona de Barón Nashor. Una danza que no podían permitir desde el conjunto barcelonés, que cayo en una trampa que nadie podía prever en su intento de denegar la condición de victoria del equipo ártico. A caballo entre la suerte y la pillería, el bueno de Oscarinin hizo saltar por los aires la piña explosiva para desbaratar cualquier posibilidad de BCN Squad y cerrar el partido de una vez por todas.
Hemos tenido que llamar al VAR y ver la jugada una docena de veces, y parece clara la intencionalidad de Oscarinin. De haberlo hecho a propósito estamos sin duda ante una de esas jugadas de “cerebro galaxia”. El resultado es perfecto: Gragas se queda completamente vendido para que el equipo acabe con él a placer y consiga el objetivo neutral que necesitaba para certificar una victoria que no se podía dilatar más en el tiempo ante la siempre amenazante presencia de Aphelios y Viktor en el equipo enemigo.
El League of Legends está en los detalles y el carrilero superior fue capaz de hacer una jugada de esas que se miden en quilates. Acompañó el desempeño de todo el equipo, con un Freskowy especialmente destacado, pero esta fue la jugada responsable de poner fin a la resistencia de un BCN Squad que está ofreciendo mucho más de lo esperado en estas primeras jornadas de competición.