Según comenta Variety, Netflix ha dado pedido la realización de dos animes que sumar a su repertorio de programas y series propias basadas en IPs externas. Se trataría de Tomb Raider y de Skull Island. El primero os será bien familiar, ya que se trata de nada más, y nada menos, que la enésima revisión y adaptación de las aventuras de Lara Croft, un personaje nativo del mundo del videojuego que ya ha contado con diversas adaptaciones al mundo del cine.
El segundo anime giraría en torno a las aventuras de una tripulación que ha naufragado en la isla titular, y se cruzará en el camino de King Kong en Skull Island, la isla que protege de las bestias, y estará basado, en las películas modernas del universo de los monstruos, en las que King Kong y Godzilla son los grandes protagonistas de la función. De hecho, se ha desvelado que narrará hechos posteriores a Kong: Skull Island, pero anteriores a Godzilla vs. Kong, que se estrena en 2021. Se encargará del guión y será productor ejecutivo de esta serie Brian Duffield, que ya es conocido en Hollywood por su trabajo en Underwater y The Babysitter. Del arte se encargará Powerhouse Animation, que ya ha realizado para Netflix las adaptaciones de Castlevania a este mismo formato.
En cuanto a la serie anime de Tomb Raider se desarrollará tras los eventos de la reciente trilogía de videojuegos, y no tendrá ninguna relación con las películas protagonizadas por Alicia Vikander. En este caso el guión y la producción ejecutiva correrá a cargo de Tasha Huo, que ha hecho lo mismo ya en The Witcher: Blood Origin, que es un anime que cuenta los orígenes de la serie principal de esta licencia, que gira en torno a Geralt de Rivia.
No hay fecha para ninguna de las dos adaptaciones, por lo que imaginamos que al menos tocará esperar hasta 2022, y serán exclusivos de Netflix. Por supuesto, cuando sepamos algo más, sobre todo del anime de Tomb Raider, os lo contaremos con presteza.