Uno de los problemas que ha tenido más incidencia en VALORANT es el de la toxicidad. Los jugadores llevan haciendo notable la situación en redes sociales y foros de la comunidad desde poco después del lanzamiento del título. Riot había prometido actuar al respecto y subsanar la situación. Sin embargo, hasta ahora la desarrolladora no se había atrevido a ratificar sus palabras con un acto que hiciera pensar que ser tóxico saldría caro. Afortunadamente, eso está a punto de cambiar.
En uno de tantos hilos en los que la comunidad manifiesta sus problemas a este respecto, un jugador decidió hacer una propuesta: sancionar a los jugadores baneados del chat de texto o voz de forma que no pudieran unirse a partidas competitivas. Los motivos son múltiples. Normalmente tener un jugador que no se comunica es una desventaja que, si está impuesta por Riot Games, se siente tremendamente injusta. Además, a nadie se le escapa que cuando las partidas no acaban de ir bien, estos jugadores son los primeros en volver al comportamiento disruptivo.
La idea ha calado en la desarrolladora, que apenas un día después respondió dando la buena nueva. “¡Os escuchamos! Vamos a evitar que los jugadores sancionados con restricciones de chat o voz puedan jugar partidas clasificatorias a partir de las próximas dos o tres actualizaciones. Estamos trabajando activamente en esta tecnología y ha tardado un poco más de lo que esperábamos, pero estamos comprometidos”, señaló uno de los desarrolladores de VALORANT.
Desde Riot Games han querido aclarar que usar el chat de voz no es ni será obligatorio y entienden que hay muchos motivos para no querer utilizarlo. Algunas trabajadoras de la compañía incluso han señalado que, aunque lo utilizan porque entienden su importancia, a veces les cuesta encontrar otras “personas cuyas voces que pueden ser objetivo de jugadores tóxicos” utilizarlo. Paradójicamente, quizás esta sea una de las medidas que ayuden a VALORANT a tener más usuarios activos en la conversación de voz.