El mercado único europeo no sólo es físico, si no que abarca también las ventas digitales. Esto quiere decir que no existen aranceles para dichas transacciones y que todo el territorio euro cuenta con políticas que las facilitan con independencia del país de origen y el de destino. Pues bien, parece que esto ha sido incumplido por varios actores de una industria digital de enorme importancia en Europa como son los desarrolladores y editoras de videojuegos.
Tal y como ha hecho pública la Comisión Europea, se ha sancionado a Valve, Bandai Namco, Capcom, Focus Home, Koch Media y ZeniMax con un total de 7.8 millones de euros. La razón es que "Valve y los publishers han vendido ciertos videojuegos de PC con restricción de fronteras dentro del Área Económica Europea", según argumenta esta institución.
La vicepresidenta ejecutiva de la Comisión Europea, Margrethe Vestager, quien está al cargo de las políticas de competencia, ha dicho lo siguiente: “Más del 50% de los europeos juegan a videojuegos. La industria del videojuego está en un gran momento y en estos momentos equivale a más de 17 billones de euros. Las sanciones contra el "bloqueo por región" de Valve y cinco publishers de PC nos sirven como recordatorio de que la ley de competencia europea prohíbe que las compañías restrinjan ventas sobre territorios. Dichas prácticas privan a los consumidores europeos de los beneficios del mercado digital único europeo y de la oportunidad de comprar la mejor oferta que exista en Europa".
Hay que destacar que esas reducciones aplicadas en la tabla se producen por la cooperación de las empresas a la hora de analizar esta situación. Todas ellas han cooperado en mayor o menor medida, mientras Valve ha decidido no atender a los requerimientos de la institución europea, razón por la que ha sido multado con 1.6 millones de euros. Steam ofrecía a los publishers la opción de bloquear ciertos juegos en ciertas regiones dentro de la denominada como Área Económica Europea, algo que no es legal.
Aunque no se dicen cuales fueron esos juegos afectados, se comenta que serían en torno a 100 títulos para PC. Se impedia a los consumidores activar y jugar a esos juegos vendidos por el publisher tanto en medio físico, como mediante descargas. Para la comisión, esto significa lo siguiente: "las prácticas ilegales de Valve y estos cinco publishers fragmentaron el mercado del Área Económica Europea y violaban la ley antimonopolio de la Unión Europea".