En sus inicios, Call of Duty: Warzone no tenía nada que ver con lo que es ahora. No nos referimos a cambios en el mapa, eventos o novedades cosméticas a lo Fortnite, sino a su estilo de juego. El arsenal de Modern Warfare estaba mucho más compensado que el actual de la temporada 1 de Black Ops Cold War, y eso permitía que se pudieran sacar jugadas tan espectaculares como las de MerK en el siguiente vídeo capturado por TeeP.
Espectaculares porque armas como la Grau 5,56 o la MP7 requerían, y requieren, de habilidad para usarse correctamente. Son muy precisas y apenas tienen retroceso, cierto, pero en manos poco inexpertas no funcionan igual de bien que en manos de profesionales. La DMR 14, por el contrario, es un descontrol, porque cualquiera puede dar un par de balas a alguien y tumbarlo al instante. Las jugadas se han vuelto un poco menos emocionantes, puesto que con la DMR todo parece más fácil y asequible.
Pero este clip pertenece a la etapa de Modern Warfare, a las primeras temporadas de Warzone. Veréis que MerK se hace casi un 1v8 él solo en mitad de TV Station. Sin apenas recargar las armas y sin ponerse placas de blindaje. Va exterminando con todos los enemigos con los que se encuentra hasta que, al final, el cargador de la Grau le juega una mala pasada y se acabó la fiesta. Si hubiera jugado con una Type 63 o una DMR 14... ¿Habría tenido el mismo mérito?
Nosotros nos enamorados de Warzone en su día por cosas como esta:
HusKerrs no necesita usar las mejores armas del juego para ganar en Call of Duty: Warzone. El jugador con más ganancias en torneos del battle royale de Activision se sobra y se basta para arrasar con una simple ballesta.
