Una de las diferencias de VALORANT con el resto de shooter tácticos son los ajustes que Riot Games introduce al juego cada muy poco tiempo. Tener personajes únicos en forma de Agentes con habilidades y combinaciones singulares hace que la desarrolladora tenga que esforzarse constantemente, pero en contra de lo que a veces es el sentir general de la comunidad, la situación está bastante bien encaminada.
Desde Riot han querido pedir confianza a los jugadores aprovechando para hacer un ejercicio de transparencia encomiable. Las explicaciones sobre cómo se toman las decisiones, en base a una ingente base de datos en la que se mide de forma objetiva casi todo lo que pasa en la partida, son bastante convincentes. Sin embargo, han tenido en cuenta los escépticos para dar un ejemplo detallado que quizás te deje con la boca abierta.
Se trata del caso de Sage. La sanadora por excelencia de VALORANT se ha convertido en un foco de polémica desde que se lanzó el juego. Primero se discutía sobre su poder y luego sobre si Riot se había pasado con los nerfs. Sin embargo y en contra de la creencia generalizada, la desarrolladora nos ha arrollado con datos y demuestra que, pese a todos los cambios aplicados, su presencia en partidas sigue siendo elevadísima, solo siendo superada por su eficiencia.
Riot Games tiene en cuenta dos factores principales. En primer lugar, los emparejamientos diferenciados, es decir, cual es la tasa de victorias de un agente cuando solo está en uno de los dos equipos. En segundo, su presencia en las colas competitivas. A esto se añade, además, la percepción de la comunidad para detectar fortalezas que puedan no decir las estadísticas y la labor profesional de los propios desarrolladores.
Sin embargo, el punto interesante es el de la percepción de la comunidad, que también hay que tomar con cautela. Como demuestra la desarrolladora, pese a esos nerfs teóricamente excesivos y que se iban a cargar el personaje, Sage nunca bajó del top tres de agentes más poderosos pese a que la comunidad defendía que era el agente de VALORANT que parecía más débil.
Lo cierto es que es imposible refutar el planteamiento de Riot Games. Los datos respaldan a la desarrolladora y demuestran que en muchas ocasiones la opinión de la comunidad genera un efecto de bola de nieve que altera la percepción de muchos jugadores.