Si os decimos que un título empieza con un tipo al volante que usa su teléfono y que viaja entre árboles, podéis pensar en más de un título. Desde Deadly Premonition hasta una versión moderna de Twin Peaks, por no hablar de una visión algo descafeinada de Silent Hill. Empezamos bien, por qué no decirlo. Bienvenidos a Twin Mirror, un juego al que ya hemos tenido acceso y que nos procurará una intensa experiencia con una potente carga psicológica. Y sí, en cuanto lo hemos puesto, hemos notado lo mismo que en alguna que otra ocasión: es como si muchos videojuegos de temática inquietante tuviesen puntos en común. El bosque ya se ha convertido en una de ellas. En este caso parece que empezamos de maravilla, vamos a un funeral, que eso le gusta a todo el mundo.
Hemos vuelto a nuestro pueblo natal, donde vamos a disfrutar de las espectaculares vistas desde un hermoso mirador en mitad de la nada, un lugar espléndido para hacer tiempo antes del mal trago. Twin Mirror es muy analítico, y al menos al comenzar vamos a escuchar la voz del protagonista analizando los elementos visibles, junto con recuerdos asociados. Un punto bucólico e introspectivo, sin duda. Además, estamos en West Virginia. Si hay por aquí algún fan de Fallout igual ya está tarareando junto a quien suscribe estas líneas… Poquísimo después todo cambiará y nos veremos inmersos en una suerte de viaje mental por diversos entornos que flotan en el infinito, con recuerdos que nos rodean y un toque especialmente “ánimus”, si Ubisoft me permite la licencia de emplear el término. No cabe duda, nos movemos por nuestros recuerdos representados en el espacio.
Poco a poco, las memorias se van sucediendo ante nuestros ojos. Y atentos, que hasta tenemos una pedida de mano de por medio. Tenso romanticismo que se amontona en una mente que parece estar algo fragmentada. De hecho se nos ha ido el tiempo. Sí, ahora estamos seguros. En Twin Mirror nos espera un juego mental bastante interesante. La narrativa lo es todo en este título, que visualmente parece que no nos va a decepcionar. Bien es cierto que aún estamos afincados en la era de PS4 y Xbox One, pero es que tampoco nos hace falta más. La ambientación es sensacional, y tiene un peso especial la elección de respuestas durante las conversaciones. Por cierto, va a ser poco placentero en lo social, al volver al pueblo nos tienen ganas. Aunque nuestro misterioso acompañante, al que por supuesto solo vemos nosotros, nos ayuda durante el trance. Poco a poco vamos a ir construyendo nuestro árbol de personajes, mientras los vamos conociendo y viendo sus características. Paso a paso nos sentimos más cerca de lo vivido en Heavy Rain, en muchos sentidos.
Debemos reconocer algo: las expresiones faciales están a un alto nivel, al igual que el diseño de escenarios. Estamos en una triste celebración en un bar, echando de menos a nuestro amigo Nick, del que se celebraba el funeral. En cierto momento, un recuerdo nos traerá cierta referencia a un personaje de Namco, uno bien conocido. Con recreativa y todo. En general, está claro que nos enfrentamos a un producto extremadamente narrativo, en el que la acción es pausada, aunque nos movamos por diversos entornos, pero con una mezcla de realidad y recuerdos que nos ayudará, en parte, a saber qué ha pasado y cómo ha ocurrido todo lo anterior a nuestra aventura. Un autoanálisis muy visual y con muchas consecuencias para la trama, que en algunos sentidos nos puede hacer volver la vista hacia aquel casi olvidado Remember Me.
Solo hemos podido jugar un fragmento de Twin Mirror, pero lo que apunta, lo hace muy bien. Un producto sólido, con un apartado visual potente y que, pese a que siga en la generación que nos ha ocupado hasta ahora, sabrá satisfacer gracias a su reposada apuesta, lo que le permite centrarse en aspectos formales, en gesticulación y en ambientar la acción mientras diversas zonas nos sacan de la realidad hasta un mundo mental profundo. Todo un viaje del que sabemos que nos queda mucho por conocer, pero que se suma al género de grandes como el ya citado Heavy Rain e incluso Beyond: Two Souls. Eso sí, es un producto que no funciona igual para todos los públicos. Hay que separarse de la acción o la exploración más activa, y centrarnos en un puzzle mental y un contenido más argumental que en otros géneros cercanos. No es de terror, aunque tiene un aire deprimente y oscilante, como tampoco tiene sarcasmo pero sí una chispa bastante resultona en Muley, su personaje principal. Una apuesta por las aventuras y por un punto mucho más de “serie de TV” interactiva.
En MGG España seguiremos muy de cerca este juego, que puede ser una de las apuestas más sólidas dentro de su género para los próximos meses. Y a la espera de tener más contenido sobre la mesa, os confirmamos que lo visto hasta el momento va a un gran nivel, con su homenaje retro y todo. Y es que hay géneros y temática para todos, pero un buen argumento es algo a lo que dudamos que nadie haga ascos, y eso a Twin Mirror le sobra. Si quieres saber más, Twin Mirror estará disponible en PS4, Xbox One y PC (a través de Epic Games Store) a partir del 1 de diciembre de 2020.