Si una saga ha hecho volar nuestra imaginación, esa es Pokémon. Pocos juegos a lo largo de la historia pueden despertar un sentimiento de nostalgia tan profundo en sus jugadores como lo hace el desarrollado por Game Freak. Una apuesta que era de todo menos segura y que nació cuando Junichi Masuda trató de reflejar su niñez coleccionando bichos en un videojuego. Fueron una serie de circunstancias imprevistas las que lo rescataron y, a partir de ahí, todo es historia.
Casi un cuarto de siglo desde que las entregas de Pokémon Rojo y Verde llegaron a Japón para acabar conquistando el mundo entero. Una primera generación que muchos todavía recuerdan con inmenso cariño y desde la que llevamos haciéndonos una pregunta evidente: ¿cómo serían los pokémons si existieran en el mundo real? La evidencia dice que nunca lo sabremos, pero decenas de artistas han tratado de aportar su granito de arena para acercar al universo tangible las criaturas que solo existen entre códigos y texturas.
Uno de los mejores esfuerzos en este ámbito nos llega de la mano de Joshua Dunlop. Un artista londinense que ha hecho un esfuerzo por crear una zoología pokémon que acerque a las criaturas a nuestro universo. Cada detalle de su biología transferido a su adaptación natural en el medio más similar en el que aparecen en los videojuegos. Al final, Pokémon está inspirado en cazar bichos y tiene el aliciente del combate.
Sin embargo, la naturaleza tiene sus normas y las criaturas no son tan adorables cuando las vemos en nuestro mundo conocido. Eso sí, el hecho de que no sean tan “agradables a la vista” no le quita ni un poco de mérito a la creación, que está perfectamente desarrollada.
Os dejamos unos ejemplos:
Además, en su canal de YouTube ha subido un “como se hizo” sobre Slowpoke que, si podemos dar nuestra opinión, nos parece uno de los mejores y más tenebrosos de todos. Si queréis ver todas sus creaciones de pokémon, visita obligada a su ArtStation.