Uno de los fichajes del año en el League of Legends no ha sido ni un jugador profesional ni un entrenador. Tyler "Tyler1" Steinkamp, el mediático streamer norteamericano, firmó por T1, el equipo del reconocido de forma mundial como mejor jugador de la historia del juego como es Lee "Faker" Sang-Hyeok. Una sinergia algo extraña, pero que llevaba un tiempo siendo evidenciada por la simpatía entre ambos en eventos como los All-Star de League of Legends en Los Angeles.
Es cierto que Faker lleva desde 2016 sin ganar unos Worlds y que ni siquiera ha competido en la edición de este año, algo que ha hecho pensar a no pocos fans que quizás ya no es el mejor jugador del planeta, o que, como mínimo, necesita nuevos compañeros para volver a triunfar. A pesar de que tiene a dos ADC de gran nivel como el veterano Teddy y el novato Gumayusi, quizás necesiten un Draven como el de Tyler1... Al menos como revulsivo (es broma).
Tyler1 es un rostro carismático, capaz de ascender desde los infiernos del ban permanente, lavar su imagen de tóxico y crear torneos tan divertidos como el Tyler1 Championship Series o pasar a ser uno de los streamers más divertidos de League of Legends en habla inglesa. Pero además de todo esto, resulta que siempre ha sido un gran jugador de Draven.
En este clip extraído de una de sus últimas emisiones en directo, Tyler realiza un outplay a dos campeones como son Jax y Lucian. Da igual el aturdimiento del primero y el daño elevado del segundo, Draven se vale de la curación de su Espada de Doran y Cetro Vampírico para terminar con sus vidas.
Pero lo más loco es que cuando Tyler1 entra en modo enajenación mental, llega un Shaco despistado que ni siquiera acaba con la vida del streamer. Un par de hachazos giratorios, su habilidad definitiva y la ayuda de los súbditos sirven para acabar con el jungla rival. Una victoria que hace que Tyler1 se vuelva completamente loco y eche a correr por su casa emitiendo sus clásicos gritos.