Cuando pensamos en un jugador de League of Legends polémico, es muy probable que el primer nombre que nos venga a la cabeza sea el de Forgiven. Konstantinos-Napoleon, que así se llama el histórico tirador griego, ha sido en numerosas ocasiones el indeseado protagonista de la máxima competición europea. Tanto en LCS como en la refundada LEC, sus salidas de tono han estado al orden del día.
No tuvieron demasiados problemas los clubs mientras que sus actuaciones en la Grieta del Invocador respaldaban su cuestionable actitud en las partidas. Sin embargo, a lo largo de la última temporada con el Schalke 04 la situación se fue de madre por discrepancias entre el cuerpo técnico y los responsables del equipo con el tirador en un comienzo de año en el que ni él ni sus compañeros estuvieron a la altura.
Aun así, el hijo pródigo siempre emprende un viaje de eterno retorno, algo que no iba a cambiar para el próximo año 2021. Ni el servicio militar ni un capítulo del todo desafortunado en la competición iban a acabar con él, y ahora anuncia con su desdén habitual que quiere volver a competir y escucha ofertas de los equipos.
Lo va a tener difícil el griego para hacerse con un hueco en alguno de los quintetos de LEC. Es poco probable que ningún equipo interesado en él pueda cumplir con sus exigencias competitivas o lo elija por delante de los tiradores que vienen apretando fuerte desde las ligas regionales y han brillado en el pasado European Masters.
Aun así, la resurrección eterna vuelve a estar sobre la mesa y Forgiven es una oportunidad de mercado. Está claro que el tirador se ha devaluado y es ahora asequible para equipos que quieran una operación con una recompensa potencial extremadamente alta. El talento del tirador, por muy mala que fuera su última campaña, está fuera de toda duda. Ahora está por ver si algún club se arriesga a intentar la tarea que otros tantos no pudieron completar: meter en redil al supertalento griego.