Tras tres años compitiendo en Overwatch, la competición de League of Legends puede celebrar la vuelta de Gamsu. El top laner coreano formó en el conjunto de Fnatic en 2016 y fue parte de uno de los mayores fracasos recientes del equipo. Llegó al equipo británico de la mano de Spirit, que por entonces era uno de los junglers punteros del panorama mundial.
Sin embargo y pese a que parecía una dupla prometedora, nunca acabó de cuajar. Tanto fue así que, tras apenas medio año en el equipo y con un fracaso de por medio que los dejó sin mundial, Gamsu hizo las maletas para pasarse a un recién lanzado Overwatch, donde fue capaz de asentarse. Ahora, tras una carrera de relativo éxito en la que siempre ha sido capaz de mantenerse en la élite del juego de Blizzard, ha decidido volver a un League of Legends con el que tiene cuentas pendientes.
Su retorno no será sencillo. El jugador pudo militar en equipos de europeos o norteamericanos, pero en ningún momento fue capaz de llegar a conseguir títulos importantes o labrarse una reputación que merezca ser recordada más de tres años después de su marcha. Aun así, es una cuenta pendiente histórica para el jugador que, probablemente afectado por el efecto llamada de las numerosas bajas de la liga, cree que ahora puede saldar.
Gamsu tiene ya 25 años y todavía está por confirmar si seguirá jugando como top laner o buscará establecerse en alguna otra posición. Tampoco ha revelado si ya cuenta con alguna oferta en firme o su decisión ha sido completamente unilateral y a la espera de conseguir recuperar su nivel para buscar un nuevo equipo en el que competir.
La situación no acaba de dejar en buen lugar a la Overwatch League. Pese a que no han trascendido los motivos de su marcha de la competición, cada vez son más los jugadores que ponen pies en polvorosa y abandonan el título de Activision-Blizzard.