Han tenido que pasar diez ediciones de Worlds, pero finalmente hemos presenciado por primera vez una remontada histórica. El “reverse sweep” es el término con el que normalmente se conoce en el mundo anglosajón a lo que hoy ha conseguido TOP Esports ante Fnatic: darle la vuelta a una desventaja inicial de dos mapas en un mejor de cinco.
Hasta ahora y aunque KT Rolster se quedó muy cerca de completarlo en 2018, no habíamos visto a ningún equipo capaz de lograr la machada en la máxima competición internacional de League of Legends. Ya es un fenómeno de por sí peculiar en citas a menor escala, pero parecía que en la práctica era imposible en un torneo de tal magnitud.
Para que al fin pudiéramos presenciarlo, tuvieron que juntarse el hambre con las ganas de comer. Fnatic se ha mostrado endeble en lo que refiere a aspectos psicológicos del juego a lo largo de todo el año y empezó a cometer errores tras patinar en la tercera partida ante TOP Esports. El conjunto chino es uno de los mejores del mundo (y habrá que ver si no son el mejor), por lo que cada mínimo fallo del cuadro británico fue duramente castigado.
Se las prometían muy felices los fans europeos tras los dos primeros mapas, y había motivos para ello entre el buen juego desplegado por Fnatic y la abrumadora estadística que jugaba en contra de los chinos. Sin embargo, la realidad es que, aunque no haya sido la remontada que muchos hubieran querido ver y TOP Esports sea ahora el malo de la película, han logrado una hazaña histórica.
Por delante queda un periodo de traspasos en el que parece que cambiarán muchas cosas en los europeos. En cuanto a TOP Esports, están en semifinales y han asegurado que al menos un equipo de la región podrá disputar la gran final de los Worlds. Serán ellos o Suning, dependiendo quien se imponga en una semifinal del mundial con sabor a LPL.