Microsoft acaba de soltar una bomba de flotación a la industria del videojuego anunciando la compra de Zenimax Media, compañía madre de Bethesda Softworks, que son los responsables de sagas tan importantes como Doom, Elder Scrolls, Wolfenstein y Fallout. De esta forma pasan a formar parte de la familia Xbox, con lo que sus juegos futuros serán exclusivos para consolas Xbox y PC, una vez se liberen los contratos ya firmados por la compañía (como la exclusividad temporadal de Deathloop de un año para PS5).
Se habla de una cifra de venta verdaderamente exhorbitada: 7.500 millones de dólares por la totalidad de la empresa, sus licencias, y equipos de desarrollo asociados.
De esta forma todos los estudios de la marca pasan a ser propiedad de Microsoft, junto a todos los juegos y licencias en desarrollo presente y pasado. Las 2.300 personas que trabajaban para Bethesda pasan ahora a formar parte de la plantilla de Xbox, incluyendo los siguientes estudios:
- Bethesda Softworks
- Bethesda Game Studios
- id Software
- ZeniMax Online Studios
- Arkane
- MachineGames
- Tango Gameworks
- Alpha Dog
- Roundhouse Studios
Entre las licencias que pasan ahora a formar parte de la cartera de lanzamientos de Microsoft de la mano de Bethesda encontramos los siguientes:
- Doom
- Fallout
- The Elder Scrolls (Skyrim, TESO, TESO VI...)
- Dishonored
- Wolfenstein
- Quake
- Prey
- Starfield
- The Evil Within
Además, los juegos de Bethesda llegarán a Xbox Game Pass, como el resto de juegos producidos por los estudios propiedad de Microsoft, aunque aún no se han desvelado detalles sobre fechas y juegos concretos que entrarán a formar parte de este servicio.
Pete Hines ha dicho respecto a la independencia de Bethesda que "todavía somos Bethesda. Seguimos trabajando en los mismos juegos en los que trabajábamos ayer, hechos por los mismos estudios con los que hemos trabajando durante años, y esos juegos estarán publicados por nosotros."
Esto abre el debate del nivel de libertad de Bethesda tras la compra, y si sus juegos seguirán llegando a otras consolas. Es posible que Microsoft no entre de forma disruptiva en la compañía y permita lanzar los proyectos actuales tal y como estaban planificados, pero sí que haga que los juegos más lejanos de la compañía se conviertan en exclusivos de Xbox en consolas. Eso, y que todos sus juegos estarán disponibles desde el día 1 en Xbox Game Pass.
¿Será esto lo que nos querían anunciar, sin mediar palabra, allá por mediados de julio a través de las cuentas oficiales de Bethesda? Es posible...