PS5 y Xbox Series celebran una de las grandes novedades que al fin llegará de forma oficial a las consolas: el Ray Tracing o trazado de rayos. Ya ha estado disponible en algunos títulos de la actual generación de una u otra forma, pero sin la calidad esperada de lo que debería ser un salto gráfico histórico para los sistemas de sobremesa.
Ahora, entrará de forma oficial a formar parte de las grandes bondades de las nuevas Xbox Series y PS5 para mejorar la iluminación y los reflejos. Sin embargo, no parece que durante los primeros compases de la generación vayan a estar a la altura de una tecnología que en el universo del PC ya está disponible desde hace un par de años. De hecho, la segunda generación de gráficas con esta tecnología está a la vuelta de la esquina con las NVIDIA RTX 30.
Xbox Series X promete montar la gráfica más potente de la nueva generación. Sin embargo, parece que ni la reina de la fiesta va a ser capaz de aguantar el tipo en una comparación contra el PC. Según apuntan desde MuyComputer, el problema podría deberse a la integración de los núcleos para trazado de rayos en las unidades de texturizado y los problemas técnicos que genera esta solución.
Se trataría de un problema común a las dos grandes consolas de nueva generación. Tanto PS5 como las nuevas Xbox montan gráficas AMD con arquitectura RDNA y sufren, por este motivo, el mismo problema: la reducción de la calidad gráfica final del trazado de rayos, que se genera mediante técnicas de interpolación para evitar que desentone, pero que no consiguen un resultado final al mismo nivel.
En definitiva, las gráficas que montan ambas consolas están limitadas por su propia arquitectura. Podríamos estar ante un problema de inicio de la generación y falta de dominio que se haga menos grave conforme esta va a avanzando.
PS5 y Xbox Series X aportan ciertas ventajas con respecto al mundo del PC. Entre ellas el precio más asequible y la garantía de que tendrán un ciclo de vida de seis o siete años. Sin embargo, en lo que respecta a potencial gráfico y trazado de rayos, las consolas van a pasarlo muy mal en la comparación.
Es uno de los juegos de nueva generación que más se han promocionado durante estos meses y Godfall será de la partida en PS5.
