Call of Duty Black Ops: Cold War está a la vuelta de la esquina. El juego debutará en la actual y la próxima generación tratando de reiniciar una franquicia que vive una segunda juventud gracias a Modern Warfare y Warzone. Sin embargo, lejos de centrarse solo en el multijugador o abandonar el modo campaña, la próxima entrega de la franquicia retoma los principios básicos de Black Ops y promete una experiencia de acción y espionaje en la guerra fría.
Parte de la primera misión de la campaña se nos ha revelado en un gameplay que sabe jugar con los tiempos y crear momentos de incertidumbre y sigilo que explotan en uno de los tiroteos más espectaculares de la franquicia, y eso que hablamos de la saga Call of Duty.
Black Ops Cold War hace todo un alarde de las nuevas mecánicas y el potencial gráfico desatado de la nueva generación, prometiendo ponernos en situaciones realistas. Eso sí, aunque tengan su base real no vamos a perder el estilo arcade que caracteriza a todas las entregas de la franquicia.
En el primer gameplay hemos tenido la oportunidad de ver nuevas formas de ejecutar a los enemigos, escudos humanos y la presencia del emblemático coche radiocontrol explosivo para derribar nada menos que un avión enemigo que está intentando enfrentar el despegue. Todo en medio de una ensalada de tiros que promete no dejar un respiro en el momento en el que la acción se desencadene.
La apuesta por el modo historia es una de las claves de la saga Black Ops. En este Call of Duty Cold War tampoco lo van a dejar pasar. Algunas de las mejores campañas de la saga, con permiso del primer Modern Warfare, nos las ha traído Treyarch y si el reinició está al nivel de las primeras entregas puede que vuelva a ser un peso pesado para justificar la compra.