Hace un mes nadie conocía Among Us y ahora se ha convertido en el fenómeno del verano, disputándole el trono a Fall Guys, el otro juego que ha revolucionado internet durante estas semanas. Pero, ¿de dónde viene su éxito?
Among Us es un videojuego independiente creado en 2018 por tres desarrolladores; aparentemente es un juego sin demasiada profundidad técnica y su propuesta es realmente sencilla, inspirada en juegos de mesa como Asesino. Al igual que con Fall Guys nos preguntamos, ¿por qué no se le había ocurrido a nadie antes?
El caso es que un juego de 2018 se está convirtiendo en la sensación de 2020. Eso hace que nos preguntemos, ¿por qué no había pegado este boom si lleva dos años en el mercado? La respuesta la tenemos en que ahora mismo la industria del videojuego no bebe solo de la fuente del marketing ni de las grandes producciones, hay un nuevo ente que juega un papel muy importante: los streamers.
En ocasiones, las marcas ofrecen acuerdos a los streamers para retransmitir diversos títulos y acercarlos al público. Pero otras, los creadores de contenido optan por ofrecer contenido orgánico y jugar a lo que les place. Eso ha ocurrido con Among Us; alguien empezó a retransmitirlo y el resto de streamers importantes siguieron sus pasos.
Eso ha provocado que el contenido relacionado con el juego se haya disparado absurdamente durante las últimas semanas. Basta con ver este cuadro que ha publicado Blake Robbins a través de Twitter.
Los números del juego a partir del mes de julio son una auténtica locura, con más de 24 millones de horas vistas en apenas 30 días y una media de 145.000 espectadores, lo que le han aupado al Top 3 en el ránking de juegos más vistos.
Hasta entonces, las cifras del juego eran prácticamente irrisorias e inexistentes, pero los streamers de videojuegos han cambiado el mercado de forma drástica, consiguiendo que títulos como Among Us, que nadie conocía tras dos años en el mercado, sea de lo que todo el mundo habla y a lo que todos juegan. Y ya hay secuela en camino.