Call of Duty: Black Ops Cold War nos cuenta la historia de una conspiración de décadas que culminó a principios de la década de los 80 en el fragor de la Guerra Fría. Es una secuela directa del Black Ops original, y comienza donde terminó el primer juego, con Alex Mason, Frank Woods y Jason Hudson uniendo fuerzas con un nuevo grupo de agentes, para desentrañar un complot terrorista global.
Explorar la Guerra Fría ofrece el marco perfecto para usar armas poderosas, hacer de agentes secretos y, de paso, ofrecer la esencia que buscan los fans de la serie han esperado para la continuación de Black Ops.
En sus modo multijugador, que es lo que nos ocupa hoy, tomaremos el lugar de un agente de la CIA o de los Spetsnaz.
Una historia de tradición
No es un secreto que Call of Duty Black Ops Cold War no llega para revolucionar los modos de juego, ni tampoco el gameplay tan característico de la serie. De hecho, en lo referente a las opciones de juego encontramos lo mismo que hemos disfrutado una y otra vez durante los últimos años, lo que no es necesariamente algo malo.
Hay elementos novedosos, claro está, para ofrecer cierta sensación de renovación a la franquicia, con distintos elementos que se retocan o modifican por completo para añadir dinamismo. Por ejemplo, podemos romper ventanas para pasar o disparar a los enemigos, siendo este además un sistema que ya estaba incluido en Warzone.
Otra mecánica nueva es el uso de tirolinas para movernos entre distintas zonas o plataformas de juego, como vemos en el vídeo superior en Armada. Se trata de otra característica que ya hemos visto recientemente en Warzone, y que aporta mucho a la sensación de libertad dentro de cada partida de Call of Duty Black Ops Cold War.
Además, se añaden muchos vehículos a la ecuación: motos de nieve, lanchas, motocicletas....
Por supuesto, habrá mapas de distintos tamaños, y en los más grandes encontraremos diferentes tipos de vehículos, con los que podrás recorrer el escenario... O atropellas directamente a tus enemigos.
Los modos de juego iniciales de Call of Duty: Black Ops Cold War son los siguientes, aunque aparecerán más a lo largo del año:
- Duelo a Muerte por equipos
- Baja confirmada
- Todos contra todos
- Escolta
- Dominio
- Punto Caliente
Algunos de estos modos multijugador ya los conocemos de Modern Warfare, mientras que otros verán la luz en Black Ops Cold War. Solo el tiempo nos dirá si otros modos clásicos o actuales vuelven a la palestra (sí, te estamos mirando a ti, Guerra Terrestre).
Entre las novedades está Escolta VIP (similar al que vimos en Modern Warfare 2), en el que tendremos que escoltar o tratar de asesinar a un soldado concreto enemigo, sin reapariciones, pero con resurreciones al más puro estilo Warzone, y los usuarios cambiando de bando para disputar las mismas rondas en cada lado de la ecuación.
Además está Combined Arms Domination, un modo 12 vs 12 en el que los equipos van empujando el límite de su territorio para llevar al equipo rival a su origen y la aniquilación, con muchos vehículos y todas las novedades de esta entrega. Habrá cinco puntos que controlar que muchas opciones estratégicas a tener en cuenta. Armada será el mapa inicial en el que mejor veremos esto.
Vuelta a los orígenes
Olvídate de aquello de agonizar casi nada más entrar en el agua. Ahora vuelve la natación, y ofrece muchas más posibilidades para infiltrarte en un punto tomado por el enemigo. Podrás ponerte en la piel de un nadador de combate para eliminar a tus oponentes y dominar el campo de batalla. Esto es algo que ya habíamos vistoen CoD: World War II o Black Ops 4, pero había desaparecido con la llegada de Modern Warfare.
Además, los mapas que hemos podido disfrutar parecen heredar lo mejor de juegos del pasado. De esta forma, las siguientes localizaciones despertarán los mejores recuerdos de los jugadores más veteranos:
- Crossroads
- Miami
- Satellite
La lista completa de mapas filtrados de los que os hemos hablado anteriormente es la siguiente:
- Black Sea
- Cartel
- K.G.B.
- Miami
- Moscow
- Tank
- Tundra
- Summit
Si la ambientación añeja de CoD: Black Ops Cold War te hace pensar que el apartado visual podría no estar a la altura, estarás muy equivocado. Los mapas se han modificado para ofrecer una experiencia gráfica de alta calidad. Los mapas son bonitos y repletos de detalles. Tanto que el juego da la sensación de aprovechar la potencia extra que ofrecerán PS5 y Xbox Series X para demostrarnos de lo que es capaz el equipo de desarrolladores bajo la batuta de Treyarch.
Las Rachas de puntos y bajas más clásicas también están de vuelta. De esta forma veremos al RC-XD, ataques de artillería, Máquina de Guerra... Y el minimapa volverá a la normalidad. Este detalle había sido objeto de debate con el lanzamiento de Modern Warfare, y en esta ocasión se ha aprovechado para devolverlo a su estado anterior, mucho más funcional.
Creando una clase
Más simple que nunca, con field upgrades que funcionan con un tiempo de recarga, tres perks, dos armas, un equipamiento letal y otro de apoyo... La única novedad aquí son las Wild Cards - comodines que permiten modificar las mecánicas de creación de clase a nuestro favor, para favorecer algo más de flexibilidad.
En cuanto a las armas, podemos esperar que haya una nómina de equipamientos ya conocidos, con las opciones clásicas, pero con una gran variedad de opciones de personalización y, por supuesto, planos que nos permitan desbloquear modificaciones específicas, como podeís ver en este enlace. Podremos equipar hasta 5 accesorios por arma.
Se perdieron por el camino
Hay ciertas mecánicas de juego que no han llegado a dar el salto al apartado multijugador de Black Ops Cold War. Por ejemplo, lo primero que echaremos de menos son las puertas que se pueden abrir y cerrar, que permitía un acercamiento mucho más táctico a los lugares cerrados. El sprint táctico tampoco estará presente en el juego quitándonos así una herramienta vital a la hora de buscar y escapar a los adversarios.
Por otra parte el HUD también da un par de paso hacia atrás y se vuelve más retro. Aunque hay múltiples detalles que provienen de Modern Warfare, sí que podría decirse que CoD: Black Ops Cold War presente cierto conflicto entre lo antiguo y lo nuevo, lo que genera una sensación un tanto extraña en los primeros minutos de juego.
Otro detalle que cambia es que se reduce la cantidad de perks disponibles, echando de menos la libertad para configurar nuestra build en Modern Warfare y Warzone. Se podría decir que Treyarch ha intentado hilar fino y eliminar las posibilidades que menos se usan, pero lo cierto es que simplemente esta vez parece que hay menos opciones que en Modern Warfare.
Por tanto sensaciones encontradas en cuanto a las opciones y cierta sensación de recorte respecto al anterior Call of Duty, pero también es cierto que con el mando en las manos el juego responde a las mil maravillas, y da una sensación de solidez pocas veces igualadas.