No van a aburrirse los abogados que trabajan para Epic Games. La desarrolladora de Fortnite mantiene una batalla legal en dos flancos que la enfrenta a Apple y Google a la que ahora se une un museo estadounidense. Los motivos no tienen nada que ver con el duelo entre la desarrolladora con los dos gigantes tecnológicos y apunta a unas causas mucho mas mundanas: el uso del nombre Castillo Coral.
El museo, que está ubicado en florida, fue bautizado y registrado como Castillo de Coral. La ubicación es misteriosa desde su fundación y está totalmente edificada en piedra resultando ser uno de los lugares emblemáticos de Homestead, a unos pocos kilómetros de Florida City. Además y según versa la demanda, los motivos y la decoración son muy similares a esta zona del mapa de Fortnite.
Lo cierto es que la vista real del Castillo de Coral de Florida y el de Epic Games deja la situación bastante clara y todo apunta a un intento de sacar tajada por parte de la empresa ganando algo más de repercusión o incluso una compensación económica. Sin embargo, no parece que lo vayan a tener sencillo.
Parece difícil que Epic Games pretenda con un producto internacional como Fortnite lucrarse de un pequeño museo con repercusión local. Es cierto que cuenta con una historia tremendamente interesante, pero en la inclusión del museo en el juego está claro quién ha sido el que ha salido ganando.