G2 Esports ha cosechado una nueva derrota en esta temporada de LEC y, esta vez, lo ha hecho de una forma especialmente preocupante ante el Schalke 04. El conjunto de la Cuenca del Ruhr se ha desmarcado del resto de la competición, labrándose a fuerza de derrotas y mal juego a lo largo de ambos splits la merecida fama de ser el peor equipo de Europa.
Sin embargo y como se suele decir en otras disciplinas deportivas, los de Caps convirtieron a los chicos del Schalke 04 en internacionales. Por mucho que los jugadores del conjunto de Gelsenkirchen no estén ofreciendo suficiente nivel, siguen siendo profesionales capaces de aprovechar los errores de sus rivales. Especialmente si la cantidad de fallos es tal y su dimensión tan flagrante.
El Schalke 04 dominó todos los marcadores. Titubearon los alemanes, pero mostraron la confianza de aquel que sabe que la presencia de su rival en la Grieta del Invocador es poco menos que testimonial. Oro, torres y objetivos neutrales que solo caían en favor de los de Abbedage.
La derrota es preocupante y la narrativa de aquellos que defienden que “G2 Esports no se toma la temporada regular en serio” comienza a ser muy difícil de creer. El equipo está perdiendo su identidad a un ritmo preocupante y no parece que sus jugadores tengan muy claro como desenvolverse en el estilo de juego que hasta ahora solo les había dado éxitos.
El Schalke 04 sigue necesitando un milagro para hacer algo en LEC, pero en su camino a la redención se ha llevado por delante a un G2 Esports al que solo lo apretado de la tabla y la igualdad que reina entre el tercer y noveno clasificado le mantiene con vida. Eso sí, MAD Lions y Rogue siguen mirando desde una posición de privilegio y soñando con el título.