Aunque haya campeones que se parecen entre sí en League of Legends, algunos son bastante únicos. Muchos tienen un golpe más potente cada ciertos ataques básicos, otros movilidad a tutiplen e incluso algunos comparten daño por porcentaje de vida máxima. Pero en ocasiones Riot Games se atreve a lanzar algo muy distinto a todo lo que conocemos y que reformula League of Legends de maneras nunca vistas hasta entonces.
En este caso estamos hablando de Ivern, el jungla que se niega a farmear y se hace amigo de los monstruos de la jungla. Desde su llegada al MOBA de Riot Games el 5 de octubre de 2016, concretamente en el parche 6.20, Ivern ha sido un personaje muy complejo de balancear a causa de sus mecánicas tan distintas a la totalidad de los junglas del LoL. Ahora quizás no está en un gran momento, pero no es que necesite bufos de un 15% más de daño. Necesita cambios para ser entendido.
Aunque algunos equipos como MAD Lions estén completamente locos y hayan usado a Ivern este pasado fin de semana, lo cierto es que en 2020 y en las cuatro grandes ligas sólo se ha jugado en tres ocasiones. Zhiqiang "Shad0w" Zhao, jungla de MAD Lions, ha sido el único en lograr la victoria en el plano competitivo; pero en SoloQ no le va mucho mejor a Ivern. Según datos de op.gg, Ivern está en estos momentos en un 0.65% de uso y un 48.5% de victorias.
Ivern es un campeón de nicho, usado por jugadores que lo masterizan hasta dar auténtico miedo con él, o en situaciones y composiciones con las que es completamente provechoso jugarlo. Los indicadores de uso tan pobres del campeón obligarían a Riot Games a tomar cartas en el asunto y mejorar sus estadísticas con la receta habitual en estos casos: bufos en el próximo parche de balance.
Pero es que el mayor problema de Ivern, aún con cuatro años de existencia a sus espaldas, es lo distinto que es al resto. La Q - Lanzarraíces, hace inmoviliza al campeón enemigo, pero también permite a tus aliados que se acercen al rango necesario para golpearle. Esto es algo que no está muy bien definido y que muchos jugadores de la pirámide demográfica del juego no saben; quizás es el momento de aumentar el tamaño de esa flechita intermitente que aparece cuando es posible hacer uso de esta mecánica.
Tampoco ayuda el que sea necesario comunicarse con los aliados para decirles que una mejora está libre para ser recogida, dado que la señalización en el mapa es nula. Otra de sus habilidades icónicas como es la W - Creamaleza, no es del todo intuitiva y si no hay una gran coordinación con tus aliados puede despistar. Y lo peor de todo es que Margarita, la invocación de la habilidad definitiva, nunca ha destacado por su inteligencia. Casi es como que la IA no tiene en cuenta que el tercer golpe al mismo campeón puede levantar por los aires, y en ocasiones cambia ese tercer impacto por pegarle a otro rival.
La forma de mejorar a Ivern y que no se convierta en una bestia en las partidas profesionales no es otra que mejorar su accesibilidad, la inteligencia artificial de Margarita y hacer que los compañeros aprovechen al máximo sus capacidades.
Inspiración.