El Inside Xbox nos ha servido para ver en directo cómo será la nueva generación de consolas; cómo se verán sus gráficos.
Puede que se haya mostrado menos gameplay puro del que esperábamos, pero eso lo hemos visto con Bright Memory: Infinite, un shooter en primera persona que promete ser bastante frenético.
Pocas, pero podemos sacar alguna conclusión del vídeo de dicho juego. Hay varias cosas reseñables; entre ellas la estabilidad.
Parece que por fin vamos a estandarizar, al menos, los 60 frames por segundo en todos los videojuegos. O eso queremos pensar. El vídeo de Bright Memory: Infinite luce de una forma muy fluida; a la que deberíamos estar acostumbrados ya. El framerate no se resiente a pesar de la acumulación de elementos en pantalla o de los cambios de intensidad, ni al disparar ni en los combates cuerpo a cuerpo.
Otro aspecto que se aprecia a simple vista es el ray-tracing. La iluminación tiene momentos verdaderamente impactantes. Es difícil capturarlo en imágenes, pero en medio del combate, en los reflejos del suelo, o en la persecución final entre los dos coches se puede apreciar bastante bien.
La calidad gráfica en general también muestra un salto cuantitativo, pero es pronto para verlo. Apenas hemos visto un minuto de un juego en movimiento, pero ya se aprecia un mayor detalle visual, tanto en el diseño de los personajes como en los efectos como las partículas.
Basta con ver el tráiler de Bright Memory Infinite y seguidamente ver otro juego similar de desarrollo actual para que las evidencias se noten más.
La nueva generación está aquí; aunque de momento solo nos ha enseñado una pequeña pata. Xbox Series X ha presentado varios de sus juegos. Ahora, solo falta saber su precio y fecha de lanzamiento.