Comentaba mi amigo Miguel Casquero en redes sociales que le llamaba la atención lo cruel de la ironía de que Movistar Riders esté logrando sus mejores resultados en League of Legends cuando no dispone del Movistar Esports Center ni de la mejor de las plantillas que ha tenido. Aunque el segundo punto es, en cierta manera subjetivo (aunque ese 10-man roster ha sido uno de los mejores equipos de la historia de SLO), el primero es indiscutible.
Sin embargo, este Movistar Riders encuentra su fuerza en cosas que van más allá del talento mecánico puro. Sería propio de idiotas decir que Francisco "Xico" Cruz o Javier "Elyoya" Prades no son jugadores bendecidos con cierto dominio del teclado y el ratón, pero es razonable pensar que la potencia de estos jinetes reside en su resiliencia como bloque, en su trabajo táctico y estratégico de los parches y en la perfección de su estilo de juego.
Ayer volví a leer una cita bastante interesante para quienes disfrutaron del fútbol de principio de siglo. Bruno Demichelis, psicólogo del A.C. Milan dijo lo siguiente en una entrevista a la Revista Panenka sobre el rocoso mediocampista Genaro Gattuso: "Si le quitas su increíble fe, su feroz deseo, su determinación, su corazón bravo, su honestidad, su integridad y su generosidad, si le quitas todo esto, lo que te queda es un jugador de segunda. Sin embargo fue el jugador de mayor mentalidad que conocí en el A.C. Milan y gracias a ello se convirtió en una leyenda".
Movistar Riders comenzó los cuartos de final del European Masters contra Fnatic Rising con una derrota. El Renekton de Pride y el Corki de MagiFelix fueron demasiado a partir del juego medio y Riders ya estaba contra las cuerdas. Al tratarse de un mejor de tres, un traspiés más mandaría a casa al último representante del League of Legends español con vida en el torneo paneuropeo.
Sin embargo, esa fe de Movistar Riders sirvió para sobreponerse a la situación. Sin cometer los errores del primer mapa y eliminando la opción de que Pride volviera a hacer estragos en la calle superior al "obligarle" a usar a Sett, Riders puso el empate en el marcador. Tras unos primeros 20 minutos en los que Fnatic Rising tenía todo lo necesario para dar un acelerón y llevarse la serie, los jinetes comenzaron a brillar.
Fnatic se obsesionó con llevarse su cuarto dragón en el mapa, el cual les garantizaría una genial alma oceánica. Agarrándose al pit del drake con los premolares, Movistar Riders consiguió ir retrasando ese momento fatídico a la vez que iba ganando pequeñas batallas que le hacían ir estando en posición de disputar la guerra que sería una pelea grupal 5vs5.
Xico, con una Orianna más propia del trazado de Nürburgring que de la Grieta del Invocador gracias a las incontables mejoras de movimiento, distrajo a Fnatic en su jungla superior para que sus compañeros fueran pasando por la quilla a los jugadores rivales. Movistar Riders está en semifinales del European Masters de League of Legends.