En todos los grandes equipos de la historia del deporte hay un técnico con una importancia clave. Los Bulls de Jordan tuvieron a Phil Jackson, el Barcelona del sextete a Pep Guardiola y el G2 Esports de Caps y Perkz a Fabian "Grabbz" Lohmann. Aunque los focos suelan llevárselos los jugadores, de forma merecida, sin este eslabón no habría columna vertebral.
Grabbz llegó en diciembre de 2017 al club, con la difícil tarea de suplir a Joey "YoungBuck" Steltenpool y sus cuatro títulos de campeón con G2 en ese momento. Su buena actuación en Roccat le valió la confianza de Carlos "Ocelote" Rodríguez, pero pronto se empezaron a ver los frutos. Es cierto que la EU LCS fue territorio Fnatic en su primer año, pero G2 se cargó al RNG de Uzi en Worlds 2018.
Su trabajo ha cambiado mucho desde entonces, al necesitar lo mejor de su gestión de grupo y mano izquierda tras la llegada de Rasmus "Caps" Winther desde Fnatic, pero sus líneas maestras en cuanto a drafts y flexibilidad posicional siguen ahí. En una entrevista a L'Equipe concedida tras llevarse esta temporada de LEC con G2, el técnico habla sobre muchos temas de actualidad.
El 3-0 endosado a Fnatic este pasado fin de semana, aunque no estuvo a la altura de lo ocurrido hace un año en Holanda, sí que fue bastante rápido. Para Grabbz, esta final fue "algo fácil", pero la razón que esgrime es que considera que G2 es "sequipo que juega muy bien cuando tiene tiempo para prepararse". De hecho, el desliz contra MAD Lions de comienzos de playoffs lo carga en su mochila al considerar que es su culpa que el equipo no se hubiera adaptado mejor al metajuego de entonces.
Esa cualidad de dejar que sus jugadores gestionen ciertos asuntos por sí mismos, al más puro estilo Steve Kerr, se evidencia con su respuesta al pick de Kog'Maw y Lulu en la final: "Discutimos los drafts el sábado y el domingo por la maana, Caps sugirió que jugáramos Kog-Lulu. No entendimos la idea en el primer momento, pero insistió y todo salió bien".
Por último, es preguntado por estos picos de rendimiento del equipo. "Deberíamos estar al 100% todo el tiempo, ¿no? Pero somos humanos y es imposible. Nuestra rivalidad con Fnatic no es solo un truco para redes sociales. Todos los jugadores tienen un extra de presión. Contra este equipo, ponemos un 10% más sobre la mesa que quizás nos falte contra los demás".