Disputar la LEC por internet no es un cambio menor. Sacar a jugadores, realizadores y árbitros de una zona común y de confort para todos puede tener inconvenientes. Sin embargo, desde Riot están haciendo todo lo posible para tenerlo todo bajo control y estar atentos a cualquier problema que pueda suceder durante las partidas como si los jugadores estuvieran sobre el escenario.
Maximilian Peter Schmidt, jefe de operaciones de Esports en Europa, ha explicado cómo controlan todas las situaciones. Son muchas las medidas que han tenido que tomar para que todo transcurra con la máxima normalidad, pero está claro que merecen la pena.
Una de las más importantes es la obligación de los equipos de emitir en directo el canal de audio por el que se comunican los jugadores para que pueda ser revisado en todo momento por los árbitros y no se puedan aprovechar de la situación. También hay que capturar la partida y enviarla a los árbitros para que puedan evaluar, por ejemplo, posibles bugs.
Los jugadores están juntos, pero aislados y sin que el entrenador pueda participar en la toma de decisiones de las partidas (por eso se retransmite a los árbitros el sonido de las comunicaciones). Además, se ha preparado a los equipos para evitar ataques de denegación de servicios de internet (DDoS) y se retransmiten las partidas con algo de retardo para que no puedan sacar ningún beneficio de la visión del mapa.
Incluso se revisarán las acciones tomadas durante la partida para comprobar que no haya trampas. La herramienta de “Chronobreak” que permite volver atrás en una partida en caso de haber algún bug en el juego está totalmente disponible y han ideado un sistema que permite pausar un encuentro y retomarlo al día siguiente por si hubiera un imprevisto mayor.
Preservar la integridad de la competición es algo que desde Riot parecen haberse tomado muy en serio. Continuar la LEC y otras competiciones de forma online es un sacrificio necesario que, aunque afecta al consumidor final, es visto como un mal menor. Lo importante es que ahora tenemos una de nuestras competiciones favoritas para amenizar este “Quédate en Casa”. Así que…, ¡quedaos en casa!