Este año es el de la llegada de la nueva generación de consolas. PlayStation 5 y Xbox Series X ya empiezan a asomar sus cabecitas en el horizonte, aunque en realidad solo hayamos visto la nueva consola de Microsoft. De hecho, de momento solo la compañía de Redmond parece querer enseñar sus cartas, seguros de que la propuesta de su próxima generación de consolas de sobremesa es ganadora, a pesar de lo que la competencia haga después, quizás reaccionando a sus anuncios.
Por un lado tenemos a Sony, que empezó a ganar la batalla de la anterior generación reaccionando a la terriblemente mala presentación de la Xbox One original de Don Mattrick. Por el otro está Nintendo, cuya Switch es posible que no sea competencia directa de la próxima generación, pero al fin y al cabo si que entra en la lucha por el tiempo libre de la audiencia interesada en los videojuegos.
Sony ha anunciado el nombre de su nueva consola, PlayStation 5, y ha lanzado el sitio online oficial de la consola... Pero nada más. No hay juegos confirmados, ni especificaciones, muestras del diseño, ni precio. Solo montones de posibles filtraciones que acaban siendo desmentidas casi tan rápido como aparecen.
Nintendo, por su parte, nos está manteniendo en la oscuridad casi absoluta sobre el futuro de Nintendo Switch, hasta el punto de que ya llevamos más tiempo que nunca sin recibir un Nintendo Direct propiamente dicho. Más de 160 días sin información y anuncios relevantes directamente de la gran N son muchos. Los rumores sobre un nuevo modelo de Switch son constantes y, además, la comunidad está demandando saber ya hacia dónde tirará Nintendo con la nueva generación de consolas en el horizonte, por mucho que digan que eso a ellos ni fu ni fa.
Lo peor de todo es que no sabemos cuándo parará esta sequía de información, sobre todo en el caso de Sony. Es de esperar que antes del E3 2020 de Los Ángeles -en el que ellos no estarán presentes- haga una presentación a medios, de forma similar a lo que ya hizo en Nueva York en 2013, para presentar PlayStation 4. Allí posiblemente se enseñe el diseño y se den detalles del hardware y/o juegos... Aunque no se mostrará todo, ya que la lógica nos dicta que dosificarán la información hasta el lanzamiento de PlayStation 5, a finales de este 2020.
Nintendo sí que va al E3 2020, pero más allá de esto, no sabemos nada sobre los planes de la compañía más allá del lanzamiento de Animal Crossing para Nintendo Switch. Sabemos que en 2020 deberían llegar Bravely Default 2 y No More Heroes 3, que Bayonetta 3 y Zelda: Breath of the Wild están en camino... Pero ya está. Por ejemplo, los rumores sobre Metroid Prime 4 son constantes y cambiantes, y tampoco sabemos hacia dónde tirará Nintendo con el Hardware.
Con todo esto en mente ¿qué está pasando por las cabezas pensantes de Sony y Nintendo?
El caso de Sony
Sony está esperando a que su competencia se pronuncie o dé un paso en falso. De hecho, aún no tienen ni siquiera fijado el precio que costará PlayStation 5, y será el anuncio de Microsoft para su Xbox Series X el que permita a Sony dar el paso definitivo. Sabemos, eso sí, que los supuestos costes de fabricación de su nueva consola son elevados, en torno a 450 dólares por unidad, por lo que el anuncio del precio de Series X determinará si pueden permitirse subir el precio y ganar algo de dinero, o si tienen que apretarse el cinturón para competir en este aspecto.
A esto hay que sumar el factor coronavirus. Esta alerta sanitaria ha paralizado buena parte de China, afectando a los niveles productivos del país, y haciendo que compañías como Nintendo reconozcan que las restricciones aplicadas afectarán a todo el hardware que están produciendo. Es decir, que Sony podría tener que enfrentarse también al factor pandémico a la hora de planificar su lanzamiento de PlayStation 5.
Hablemos de Nintendo
Nintendo suele contar al menos cuatro veces sus planes cada año. Primavera, E3, otoño y finales de año, con The Game Awards. Ahora nos encontramos con NIntendo permaneciendo en silencio desde septiembre del año pasado, lo que hace que la comunidad de usuarios de Switch se encuentre en una posición incómoda... Y a pesar de eso su consola sigue vendiéndose como churros, superando ya a la mítica Super Nintendo, por ejemplo.
En resumidas cuentas, Nintendo está, simplemente, trabajando con calma para seguir construyendo sobre el éxito de su consola híbrida. Tienen sobre sus hombros la presión de la comunidad, pero el alivio de que su máquina se está vendiendo de manera excelente. Y algo parecido ocurre con Sony, que desde lo más alto del trono de la actual generación se saben con ventaja sobre la competencia.
Es decir, que las dos compañías simplemente se comunicarán cuando se comuniquen, porque ahora mismo no necesitan anticipar aún más el hype por los próximos productos que salgan de sus manos, sean consolas, juegos, accesorios o lo que sea.
Por tanto, os sugerimos que si os entra algo de ansiedad por la falta de anuncios, juguéis a los excelentes juegos que PS4 y Switch ya tienen. Hay mucho para dar y tomar.